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Afectos
en casitas de barro
¡Qué lindo es el barrio de
las casitas de barro!
camino descalza por sus callejuelas
totalmente libre como vuelan los pájaros.
Es tan bonito que puedo sentir los gestos
de la gente honesta sencillos y frescos.
Inquieto es el bullicio de las voces contentas
impaciente las nubes... pues desean bajar...
para jugar con los rayitos del sol dócil
que se deja acariciar y acariciar...
Allí en la última vivienda mimada por un sauzal
vive una señora triste y melancólica
abandonada por un amor que un día se fue
y ella entre llantos y risas no lo puede entender.
Su corazón quebrado lo llama, le implora...
¡Es en vano señora! ¡ese amor no ha de volver!
¿Con qué magia podremos hacerle comprender?.
Olvidar es tan difícil como descender una estrella,
negar los sentimientos es fallecer de ceguera.
¡Recorramos juntas el barrio mi dulce señora!
es tan simpático que se le dibujará una sonrisa...
...las casitas de barro con sus callejuelas
esas aves volando hacia las alamedas
los niños, sus ruidos, la gente sencilla
formará en su alma un soplo de vida,
porque es en vano señora... ese afecto se fue...
Es un
deber
Es un deber ayudar a tu
hermano
mas que deber es obligación...
Es un deber no humillar a la gente
mas que deber es obligación...
Es un deber excluir la agresión
mas que deber es obligación...
Es un deber aceptar opiniones
mas que deber es obligación...
Es un deber saber escuchar
mas que deber es obligación...
es un deber dejar de someter al hombre
mas que deber es obligación...
Es un deber admitir que no somos iguales
mas que deber es obligación...
Es un deber obrar en buenas formas
mas que deber es obligación...
Es un deber abandonar la soberbia
mas que deber es obligación...
Es un deber renunciar a la imagen de ser superior
mas que deber es obligación...
Es un deber comprender que cada ser tiene sus tiempos
mas que deber es obligación...
Es un deber no exigir imposibles
Mas que deber es obligación...
Es un deber desterrar el racismo
mas que deber es obligación...
Es un deber ceder cuando es necesario
mas que deber es obligación...
Es un deber pensar al otro como persona
Mas que deber es obligación....
..no
viajaré para ir a verte
No viajaré ni un día para
ir a verte...
Esas palabras retumbaban en su mente...
Mujer de corazón destrozado...
...¿Naciste para amar sin ser amada?...
De soledad enloqueciste...
Locuras dulces por tanto querer...
Sueña días y noches de dicha infinita.
Sueña en tu demencia al que deseas.
Sueña que te envuelve de ternura
y te lleva... entre caricias y flores...
Ya no sufras, solo sueña...
Y tu ansiedad no estará vacía
Habrá palabras que retumban tu mente...
Viajaré infinitamente para ir a verte...
Dos seres
en el país de la nada
Dos seres de países
fantasmas
vivían abatidos sumergidos en la nada.
Un día uno de ellos abrió una ventana
y se encontró con el otro sentadito de espaldas,
¡lo llamó!, ¡ le preguntó cómo se llamaba!
y obtuvo como respuesta una sola palabra
ya que su alma estaba muy solitaria.
Pasó un día y volvió a abrir la ventana
y allí estaba como siempre esbozando dos palabras.
Por necesidad de encontrarlo todas las mañanas
continuó con el acto de abrir la esperanza
porque no estaba solo sumergido en la nada,
existía otro ser igual y lo acompañaba.
Comenzaron a ver un horizonte de encantos,
había flores, soles, mariposas color esmeralda
y las tinieblas de la nada se tornaron en aguas claras...
A su manera y sin saberlo ellos se ayudaban
preguntándose hasta cuándo, si existía un siempre o un mañana
entonces uno le dijo al otro...¡con el presente nos alcanza!
para observar de la nada un paisaje de magias.
El
jugador
Ingresó al estadio de la
mano de un sueño
¡Cerró sus ojos para contener aquellos sentimientos!
de corazones palpitantes vivando pasiones
de almas fundidas esbozando un canto de ilusiones.
¡Sonrió!...observó el balón y comenzó a correr con empeño
haciendo gambetas, jugando con sus piernas para llegar a la gloria
y como magia surgida del cielo...hizo el gol de la victoria...
Estalló al unísono un grito rompiendo el firmamento
y soltó una lágrima rodando en su rostro hasta el suelo
¡Levantó sus brazos!, susurró un gracias que remontó vuelo.
Regresó a su casa rodeada de amigos y con humildad...dijo...
...estoy satisfecho por deleitar a la gente, ¡cumplí mi objetivo!...
...ahora soy el muchacho de barrio, el hijo, el amigo...
©
Alejandra Oviedo
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