oblatos de María Inmaculada

Un poco de Historia

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Nuestras Casas

Los Oblatos hemos trabajado en diferentes ministerios pero nos definimos por la sucesión de fundaciones que hemos tenido en lo que antiguamente era la provinica Española, hoy territorio español, despues de la unificación.

Misioneros hemos tenido en varias regiones de España. Destacan nuestras misiones tambien fuera de la Penínsual: El Sahara y Venezuela.

Para nosotros es significativo que hoy por hoy existan tambien varios misioneros oblatos que trabajan fuera de la provincia, dejando el pabellón muy alto.

Contamos con una representación en la Administración General; el secretario provincial es tambien español; Un padre colabora con la Formación en la casa General. Hay un padre que trabaja en el Santuario de Lourdes;

Un padre trabaja en Chile, otros varios en Argentina; tenemos una representacion en Canadá.

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Multimedia

Nuestro Fundador S. Eugenio de Mazenod realizó en su vida una taera encomiable: estuvo siempre abierto a la gracia del Espíritu , por eso el mismo Espiritu le doto de un carisma especial: evangelizar a los pobres , a los mas abandonados

El Fundador Hombre Apostólico maduro

Como obispo en Marsella, Eugenio de Mazenod se encuentra en su plena madurez espiritual. Pastor incansable y lleno de celo, sólidamente arraigado en su amor a Cristo y a la Iglesia, ya no piensa más en sí mismo sino enfoca todas su energías hacia las tareas de evangelización que le habían sido confiadas, tanto en Marsella como en mundo entero. Durante este tiempo de intenso ministerio él sigue siendo un hombre de oración.

La Eucaristía

Esta era su fuente de inspiración y renovación. Tomaba a pecho celebrar la Misa diariamente, a veces con grandes dificultades, particularmente cuando iba de viaje. La Eucaristía, lugar privilegiado para identificarse con Cristo era también era el espacio preferido para unirse a los amigos y miembros de su familia religiosa. Como él decía, la Eucaristía de hecho era "el centro vivo que sirve de comunicación". Aquí piensa mucho en sus hijos misioneros, sobre todo aquéllos que misionan lejos de él, y les recomienda que hagan ellos lo mismo. "Al identificarnos cada uno de nosotros con Jesucristo, no seremos más que uno en él, y por él y en él no seremos más que uno entre nosotros."