Berta, la reina del bochinche
Por: Mary Tenorio

Gutiérrez llega muy alegre a Ecomoda. Es día de cobro y además se va de rumba muy temprano.

"Good morning," le dice Guti Gut a Berta.

"Buenos días doctor," dice Berta.

"Berta, usted suena triste hoy."

"No es nada doctor. No se preocupe."

"Very good Berta, porque hoy tenemos que hacer un informe urgente para el doctor Mendoza."

"Sí, doctor."

"Si my wife me llama, le dice que estoy muy ocupado y que no quiero que me pasen llamadas."

"Sí doctor."

"Bueno voy para my office. La espero allá."

Berta termina lo que está haciendo y va a la oficina de Guti Gut a trabajar en el informe. Mientras tanto, Armando llega a Ecomoda y le pregunta a Sandra por Berta.

"Está con el señor Gutiérrez, doctor," dice Sandra.

"Gracias Sandra," dice Armando y se dirige hacia allá.

"Buenos días," dice Armando al entrar.

"Buenos días, doctor," dice Berta.

"Good morning, doctor," dice Guti Gut.

"Gutiérrez, ¿usted ya felicitó a Berta?" pregunta Armando.

"¿Por qué my doctor?" pregunta Guti Gut.

"¿Usted no sabe que Berta cumple años hoy?" pregunta Armando.

"My God, lo olvidé. Felicitation Berta."

"Gracias doctor."

"Berta, de verdad, muchas felicidades en su cumpleaños. Y como hago con todas mis empleadas, vamos a ir a celebrarlo a la hora del almuerzo," dice Armando.

"Ay doctor. Yo se lo agradezco, pero no estoy de ánimos para celebrar. Lo siento, pero no puedo aceptar su invitación."

"¿Cómo es eso que no puede aceptar mi invitación? ¿Y eso, por qué?" pregunta Armando.

"Verá doctor. Lo que pasa es que mi marido pidió unos días por enfermedad en su trabajo porque no se sentía bien y lo despidieron," dice Berta llorando.

"¿Cómo es eso de que lo despidieron? Todo empleado tiene derecho a días por enfermedad," dice Armando.

"El jefe le dijo que él tenía la obligación de ir a su trabajo aunque estuviera enfermo, a menos que fuera una gravedad. Pero me las va a pagar."

"Dios mío, ese hombre es un malvado. No sé cómo puede haber jefes así, que tratan a sus empleados sin respeto," dice Armando en forma teatral.

"Mi marido está destruido, doctor. Después de tantos años trabajando para él, lo trata así. Lo triste es que no le pagó su sueldo del mes y lo necesitábamos para pagar la renta," dice Berta secándose las lágrimas.

"Berta, don't worry. Nosotros estamos aquí para ayudarla. ¿Verdad doctor?" pregunta Guti Gut.

"Sí, Berta. No se preocupe. Es más, llame a su marido y dígale que venga a Ecomoda. Yo tengo el trabajo perfecto parta él," dice Armando.

"¿De verdad, doctor?" pregunta Berta.

"Sí Berta, ahora que Canelo está de vacaciones, él puede encargarse de la limpieza," dice Armando.

"Ay doctor, gracias. Un trabajo es un trabajo. Se lo voy a decir a mi gordo," dice Berta abrazando a Armando.

"Vaya, vaya. Llame a su marido y dígale que lo espero acá."

Cuando Berta se está alejando, Armando sale y le dice a Sandra:

"Sandra, cuando el marido de Berta llegue, le dice que pase por mi oficina."

"Sí doctor," dice Sandra.

Berta llama a su marido y le dice:

"Gordo, que vengas a Ecomoda que Don Armando tiene un trabajo para ti."

Berta le explica en qué consiste el trabajo. El marido de Berta no acepta. Dice que él no quiere trabajar en Ecomoda.

"Pero Gordi, si es un trabajo en lo que consigues algo mejor. ¿Cómo que le diga que no? Si él quiere ayudarte. La renta está vencida, nos van a quitar la casa por tu orgullo. Lo que yo gano no da. Está bien, yo se lo digo."

Berta va a donde Armando y le dice:

"Don Armando, mi marido le dice que gracias, pero que no puede aceptar su oferta. Es que él está muy herido con su jefe."

"Pero, ¿no trataste de convencerlo?"

"Sí doctor, pero fue imposible."

"Berta, ¿y no será que su marido no quiere trabajar con usted acá?"

"¿Usted cree doctor?"

"No sé. Me está raro."

"Doctor, ¿usted está insinuando que mi marido tiene algo con otra mujer y si trabaja aquí no puede citarse con ella?"

"Yo no he dicho nada, Berta. Usted es la que ha llegado a esa conclusión."

"Ay no. Me muero si mi gordito tiene tiene otra mujer. Voy a llamarlo. Él me dijo que no quería salir. Que está muy deprimido."

Berta sale a llamar a su marido y Armando sonríe con malicia.

"Sandra, ¿este teléfono funciona?" pregunta Berta.

"Claro que sí. Si usted misma lo usó ahorita."

"Es verdad. Que raro. El gordito no contesta y él dijo que no quería salir. Yo creo que don Armando tiene razón."

"¿Qué pasa Berta?" pregunta Sandra.

"Nada," dice Berta. Se dirige a su escritorio y se pone a escribir una carta. Luego la pone en el lugar de donde las envían a su destino.

Luego va a donde Guti Gut y le dice:

"Doctor, deme el material del informe, para prepararlo."

"It's not ready yet, Berta," dice Guti Gut. "Pero, ¿usted no dijo que era urgente?"

"Sí, es muy urgent. Lo que pasa es que el doctor Mendoza no me ha dado los datos para el informe. Estoy esperando por el."

"Bien, pues me voy a mi escritorio. Tengo que hacer una llamada. Usted me avisa cuando tenga los datos."

"Yes, of course Berta."

Berta se va a su escritorio y se pone a hacer una llamada. Al terminar, dice pensando en alta voz:

"Hoy es el día más triste de mi vida, en vez de ser el más alegre. Primero, despiden a mi marido de su trabajo. Luego él no acepta el trabajo que le ofrece don Armando. Don Armando me hace dudar de su fidelidad. Guti Gut me hace trabajar el día de mi cumpleaños. Parece que todos se han confabulado para dañar mi día."

En eso Guti Gut sale de su oficina y le dice:

"Berta, el doctor Mendoza llamó. Tenemos que ir a donde él para que nos dé los datos para el informe."

"Pues vamos a su oficina, antes de que se vaya a almorzar."

"No, si ya está almorzando. De allá fue que nos llamó. Está en "The saloon", el lugar ese en donde tocan música de jazz."

"Ay doctor, yo no tengo deseos de salir."

"Lo siento, Berta, pero esto es parte de su work. Usted es my secretary y tiene que acompañarme."

"Está bien doctor. Total ya es hora de almorzar. Hasta las muchachas parece que se olvidaron que hoy es mi cumpleaños y se fueron sin mí. Pero me espera tantito que tengo que ir al baño." "Pero apúrese, que el doctor nos espera."

Berta sale del baño con lágrimas en los ojos.

"Vamos Berta, que el doctor dijo que era muy urgente."

"Sí doctor," dice Berta sin ánimo.

Cuando llegan al lugar, Berta le pide permiso a Guti Gut y sin que éste se dé cuenta, se dirige al carro de don Armando que está estacionado al frente. Luego regresa a donde esta Guti Gut.

"¿Lista Berta?" pregunta Guti Gut.

"Sí doctor. Vamos."

Cuando entran al lugar, Berta se siente incómoda. No sólo por todo lo acontecido, sino que tiene que estar en un lugar tan bonito y divertido acompañada de Guti Gut y por cuestiones de trabajo.

"Well Berta, no se quede ahí parada. Entremos al restaurante," dice Guti Gut emocionado.

"Doctor, no se emocione. Recuerde que venimos a buscar unos datos y luego tenemos que regresar a la oficina a trabajar. No se crea que se va de rumba.

"Of course Berta. Don't worry."

"Dios mío, ¿por qué me castigas así?" dice Berta en voz baja.

Cuando entran todo está muy oscuro. Casi no se puede ver a la gente que está en el lugar. De pronto, Berta siente que le cogen una mano y dice:

"Gutiérrez, no se ponga fresco. Si no me suelta, aquí mismo le entra a cachetadas."

En ese momento se escucha un:

"SORPRESA"

Ahí se encienden las luces y quien le tiene la mano agarrada es su esposo. Cuando mira a su alrededor, ahí están todos los amigos de Ecomoda.

"Pero, ¿qué es esto?" pregunta Berta echándose a llorar.

"Es tu fiesta sorpresa de cumpleaños, mi amor," le dice su marido dándole un beso.

"Pero, ¿cómo es que están todos aquí? ¿Y el informe urgente?"

"Todo eso fue una pequeña mentirita que yo me inventé para traerla acá," dice Guti Gut.

"Yo creía que no iban a llegar a tiempo," dice Armando.

"¿Qué mijita? ¿Usted creía que nos íbamos a olvidar de su día?" pregunta Aura María.

"Y usted Berta, con tanto estrés," dice Mariana.

"Oiga Berta, ¿de verdad usted se creía que su marido es como Serafín?" pregunta Sofía.

"Usted tiene a un santo por esposo," dice Inesita.

"Yo espero encontrarme a un hombre así, pero de mi estatura," dice Sandra.

"Sandra, recuerde que maridos como los de nosotras, son difíciles de encontrar," dice Betty.

"Déjeme decirle Berta, que usted se encuentra unida por el santo vínculo del matrimonio, a un gran hombre y digo gran, en todo el sentido de la palabra," dice Freddy, recibiendo un pallizco de Aura María.

"Yo no sé por qué hay mujeres con tanta suerte. Pero si su marido me acepta, le juro que jamás dudaría de su fidelidad," dice Hugo coqueteando con el marido de Berta.

"Bueno, ¿ pero es que no me van a dejar hablar?" pregunta Berta.

"Eso es parte de la broma mi amor, porque tú cuando empiezas a hablar, no dejas que nadie hable," le dice el marido a Berta. "Pero, ¿y lo de tu trabajo?" pregunta Berta.

"Es mentira. Es que yo le pedí unos días libres a mi jefe parta preparar lo de tu fiesta y él rápido me dijo que sí. Hasta te envió un regalo."

"¿Y el informe urgente?" pregunta Berta otra vez.

"Es mentira, como te dijo Gutiérrez. Fue un invento para poder traerla aquí," dice Armando.

"Todos en Ecomoda me ayudaron. Principalmente don Armando y Gutiérrez," le dice el marido a Berta.

"Don Armando te ayudó," dice Berta casi sin voz, "y Gutiérrez también. Ay Dios."

"Berta, no recuerda que yo le dije que íbamos a celebrar su cumpleaños a la hora del almuerzo. Pues era verdad," dice Armando.

"Pero, ¿por qué tantas mentiras e intrigas?" pregunta Berta.

"Pero mi amor, si eso es lo tuyo. A ti te encantan los chismes y las intrigas. Pues quise darte de tu propia medicina como regalo de cumpleaños," le dice el marido.

"Pues yo tengo algo que confesar. Primero a ti gordi. Como yo creía que estabas con otra mujer, tiré los anillos de matrimonio en el inodoro. También le envié una carta a tu jefe diciéndole unas cuantas cosas que no puedo repetir aquí."

"Ahora sí que me quedé de verdad sin trabajo," dice el marido.

"A usted Gutiérrez, como yo pensaba que se había olvidado de mi cumpleaños y además por hacerme trabajar en mi día, le hice una llamada anónima a su mujer diciéndole que usted tiene una amante." "My God, my wife is going to kill me."

"Y a usted don Armando, por hacerme dudar de mi esposo y sembrar los celos en mí, le raspé todo su auto con un alambre."

"Mi auto nuevo nooo," grita Armando. "Ja, ja, ja. Lo creyeron, ¿verdad? Y ahora, ¿quién es la reina del bochinche y de la intriga?" pregunta Berta, pero por dentro se dice, "tengo que irme muy lejos en cuanto salga de aquí."

F I N

    Reto Estilo Ecomoda #36
  • Personajes: Gutiérrez, Berta y Armando
  • Objetos/Situaciones: día de cobro, renta, llegar a tiempo, informe urgente, obligación, enfermedad

Volver a Estilo Ecomoda

Hosted by www.Geocities.ws

1