La educación contra la escuela


Cressencio Salas Ramos*
Aarón Valdez Espinoza**

I. Marco de referencia
En la historia han existido muchas micro y macro-revoluciones que han cambiado radicalmente paradigmas; la llegada de la televisión fue una de ellas, la cual dio un giro que transformó el contexto cultural (educativo, social, afectivo e incluso patológico, al presentarse un conflicto en lo real, se produce un escape hacia espacios imaginarios). Las décadas de los 40´s y los 60´s del siglo XX, enmarcaron el nacimiento de una nueva perspectiva de analizar la vida. El invento de la televisión, los estudios de la mente (que estaban marginados por el conductismo) que se concretizaron en el solucionador general de problemas -antecedente inmediato de la computadora-, el nacimiento de la tecnología educativa, así como la psicología cognitiva y la humanista, generaron nuevas perspectivas de analizar el mundo social.

El tema de la televisión y de los medios masivos de información en general había estado enfangado durante más de dos décadas, cuando el eje vertebrador era y sigue siendo -aunque no se menciona de forma explícita- el aparato ideológico del estado, como reproductor de la ideología dominante, porque evita que la clase dominada perciba sus verdaderos intereses. Tiempos donde el hilo conductor de referencia era la filosofía dialéctica. Antaño era el marxismo, en estos días se abre paso la teoría crítica y muchas otras vertientes explicativas de la interacción de los humanos con otros humanos y la naturaleza. Después se presentó un vacío ideológico en el cual la descripción del mundo fenoménico era la carta fuerte a través de hacer “ciencia aséptica” sin compromiso social; situación que es imposible, porque el investigador no puede ser neutral, pero que buscaba un conocimiento objetivo no limitado o ceñido por ninguna ideología. La frase más citada era la tesis sobre Feuerbach del joven Marx: “los filósofos no han hecho más que interpretar el mundo, pero lo que se necesita es transformarlo”, esto se menciona por el hecho de no tener un modelo de país que se quiere y carecer de la brújula que determine el tipo de hombre que se quiere. La carencia de modelo nos lleva a un homo-tecno-faber. Hoy las críticas se han enfocado al mesosistema y se tiene poca incidencia sobre los megapolios, aunque ellos son los responsables de la producción de un vacío de conciencia social.

Muchos nos hemos horrorizado de los umbrales ínfimos de aprovechamiento de nuestros educandos y hemos propuesto -en diferentes foros de la localidad- que se le dé importancia mayúscula a este rubro, para desarrollar las escuelas de calidad en los hechos no en el discurso. Por supuesto que se ha culpado a los agentes directos, pasando de un paido, magíster, contenido y estrategiacentrismo, sin supraenmarcarlos en políticas educativas nocivas de decrecimiento de los gastos destinados a la educación. Se dedican recursos ingentes a los marginados educativos -producto de las condiciones sociales- para que puedan convertirse en analfabetos funcionales de traductores de textos a un nivel semiótico elemental contextualizado pero con poca historia concéntrica, de reflexión de las condiciones de vida, es decir, se atacan los productos de líneas políticas erróneas de conducción que nos lleva a datos horrorosos de analfabetismos y se seduce al individuo como el culpable fatal de sus determinaciones cuando se deja intacta la infraestructura para generar condiciones de estudio de las próximas generaciones.

II. El éxito televisivo
De todos los medios de información, la televisión es la que ha tenido un éxito inusitado. Ni los papiros de la antigüedad o la imprenta de Gutemberg tuvieron tanta polémica por sus alcances de ocultar aún más la realidad. Si esencia y fenómeno no coinciden, la televisión hace una apología de lo fenoménico. La misión de la televisión ha sido clara: la diversión y el entretenimiento, el hedonismo, como expresión filosófica, pero la educación ha tenido muchos adjetivos: formar, adiestrar, crear, desarrollar, criticar, reflexionar entre muchos otros. Mientras el primero se sostiene, el segundo se tambalea y está en el ojo del huracán con cada nuevo invento cibernético.

La escuela es una institución que ha cambiado poco en sus contenidos, infraestructura y docentes. Pareciera que esta generación de docentes educados en la pre-tecnología tiene poco que aportar ante los avances tecno-científicos. Casi todos los paradigmas de la psicología tienen incidencia en ella. Basta echar un vistazo comparativo de principios de los 60´s del siglo pasado y el de hoy; predomina la nostalgia y es como si el tiempo se volviera estático, los muros de las escuelas separan lo hedónico de lo formativo. Estos son espacios semiabiertos donde la intencionalidad de los saberes sistematizados es la regla para grandes cantidades de información.

La televisión, sin embargo, ha evolucionado, una sola generación ha sido testigo del cambio tecnológico de ésta, del blanco y negro a la cromática, de la información de tiempos reales a tiempos virtuales. La escuela compite con la televisión y con cualquier suceso que ocurre fuera de sus fronteras; la actividad académica mengua cuando hay juegos de selección nacional. La escuela es el receptáculo que se tambalea ante cualquier suceso social, cultural, deportivo, científico, tecnológico y accidental, sin importar el punto geográfico. La prolongación visual y cerebral (de la televisión y la computadora) no tienen rival. Es una guerra desigual entre lo conservador y lo dinámico, una con visión al pasado (con un aprendizaje de mantenimiento), la otra exteriorizando la mente en microchip y estos ojos y cerebros ambulantes los podemos tener en cualquier sitio, es raro encontrar familias sin su aparato televisivo.

A diferencia de la televisión, la radio tiene un sólo canal sensorial: el auditivo, por lo tanto se pueden realizar otras actividades, en la radio la voz es un anónimo, no hay sentido de pertenencia, podemos captar trozos informativos y lo demás lo inferimos. La televisión utiliza dos canales sensoriales de distancia: el visual y auditivo, pero la implicación del lenguaje coloquial, donde no sólo está el discurso o el texto, sino que está también el subtexto, el lenguaje implícito de las palabras o el sentido psicológico que encierra cada palabra en su significado categorial y su campo semántico. Aun el contexto o escenario que, sin mencionarse, forma parte del influjo informativo.

El juego de colores y el paso de esbozos escénicos produce activación fisiológica que lleva al efecto hipnótico. De acuerdo a investigaciones con infantes sobre sus preferencias visuales, tanto con estímulos con círculos concéntricos (dinámicos) en oposición a estímulos a cuadros (estáticos), comprobándose que prefieren los primeros, pero también se inclinan por los rostros a estímulos monocromáticos. De forma análoga ellos tienen preferencia por estímulos construidos por arcos más que los que tienen líneas rectas. Los estímulos estáticos no generan elevación en el impulso de las neuronas sensoriales que transmiten la información, pero en cambio sí las generan los estímulos complejos, y con respecto a la televisión, éstos están cambiando cada cierto tiempo, no existe, por ende, un efecto meseta para el análisis informativo, por el ingreso de señales cromáticas, dinámicas y discursivas que no permite reordenar, analizar todo el caudal informático del ojo mágico que es la televisión.

III. Cerebro y televisión
Los estímulos constantes conllevan a una habituación para producir una economía mental, y la novedad a una deshabituación; sin embargo, con la televisión la deshabituación es una constante por la creciente respuesta a las novedades de las imágenes proyectadas en la pantalla. En términos biológicos el organismo necesita un impasse, un tiempo para procesar toda la información almacenada, pero la televisión no lo permite, ésta no produce adaptabilidad por las novedades de sus imágenes, sino adicción o tele-adictos al estar influyendo sobre el segundo bloque cerebral en donde se ubica la codificación y decodificación de los exo-estímulos.

El segundo bloque cerebral es para el análisis y síntesis, la televisión describe la realidad virtual por sugestión hipnótica e imitación de los personajes centrales, pero decrece y se amputa la capacidad para tener ideas propias a través de la participación activa. Con la televisión no se manifiesta la reflexividad y la voluntad para convertirse en objeto de su propia reflexión (metarreflexión); la información es lineal, no existe búsqueda, está ya dada. La curiosidad e investigación se desvanecen porque se incide a nivel sensorial. Ahora bien, esos análisis y síntesis se llevan a cabo a través de los analizadores visual, auditivo y lingüístico, pero no intervienen los procesos psicológicos superiores que son procesados en el tercer bloque. Este bloque, que asegura la actividad psíquica a través de regular, controlar, monitorear, planificar y determinar si se finalizó la actividad en el cumplimiento de los programas, necesita tiempo para recuperar información, transformarla en novedades, que inciten al sujeto a la acción; ésta no es posible pues se está trabajando a nivel de memoria a corto y mediano plazo. La característica de este bloque es que maduran en años postreros ocupando un lugar final en la mielinización de las neuronas. Esta zona que antaño era considerada muda, hoy se considera la responsable del pensamiento abstracto, pero su importancia mengua por su poco uso a través de la pasividad del sujeto como espectador, no alcanza las operaciones formales en la tipología piagetiana. Por consecuencia, su pensamiento será situacional concreto y no paradigmático, es decir, habrá dificultades en las categorizaciones de los objetos. En este bloque citado se generan los propósitos y la regulación en la resolución de problemas no frontales, buscando rutas alternas y recuperando la información almacenada, pero si ésta es descriptiva, la conducta será impulsiva y el pensamiento sin capacidad de elaborar taxonomías del más alto nivel porque esto se logra por medio de la instrucción sígnica, por lo tanto, va a predominar un pensamiento sincrético eidético. La recuperación informática será por contigüidad, asociatividad y por contraste, que son los niveles básicos de todo ser compútico.

IV. Lenguaje y realidad virtual
¿Qué sucede con el lenguaje?, cuando el(la) niño(a) mira la televisión se rompe el diálogo con sus congéneres, se usa un lenguaje afectivo, monosilábico con el “ajá”, “sí”, “mmm”, sin discurso temático, es sólo con la categoría lógica de falso-verdadero, con la aprobación o rechazo de la acción de los personajes. Lo anterior deriva en escasez de monólogo o lenguaje interiorizado, pero además como es discurso oralizado, éste se vuelve horrorizado en el discurso escrito al no existir una correspondencia sónica-gráfica y un desconocimiento de las irregularidades idiomáticas.

La televisión es un artículo que se fabricó para su consumo masivo, no hay preocupaciones por la verdad, por el rescate y propagación de la idiosincrasia, por el conocimiento de las diferencias y similitudes como unidad nacional, es una “globalización fragmentada”, pensar globalmente, pero actuar localmente, de un mundo de contrastes sin la presencia de un conductor que ilustre, que guíe el programa. La influencia de un hedonismo light de me gusta, no me gusta, sin solidez argumentativa. Para el sujeto espectador sus referentes esquemáticos son sus otras realidades virtuales, la ficción domina sobre la realidad, la realidad es confundida con la ficción. La televisión, por un lado, no permite el diálogo, éste es extraño y cuando los niños conversan es para disgustarse por la inmovilidad paradigmática del otro que es su espejo de inmovilidad, entonces el mundo infantil se divide en mesurable e inconmensurable, sin aceptar el relativismo cognitivo de su referente real. Se hostilizan entre ellos para profundizar las diferencias y gana no el que tiene la razón, sino darwiniamente el más fuerte, se utiliza la crítica como destrucción sin una clara razón. El diálogo, por otro lado, es intercambio de ideas, es mostrar lo auténtico, pero la televisión hace a los niños -y no tan niños- con un “yo fragmentado”. Esto es la construcción de una personalidad a través de pedazos prestados y contradictorios que entran en conflicto con el mundo real. Ese mundo son lugares fantaseados e inaccesibles; la televisión funciona como pantalla de idealización creando un nivel de aspiraciones desmesuradas que exacerban la imaginación, sus deseos, sus resentimientos, su impotencia, su violencia.

El yo se vuelve esquizoide, escindido (tanto patológico, como conceptual), es decir, está en cuatro mundos: el real con los objetos, el interactivo con sus coetáneos y asimétricos, el simbólico-semiótico y el virtual de las imágenes que juegan con el tiempo. Además de estar el niño y el adolescente a caballo en operaciones concretas o pseudoformales y, por ende, no son lo suficientemente capaces para integrar los fragmentos contradictorios a su estructura cognoscitiva, sin tener apoyos empíricos concretos. Dada su capacidad en el aquí y el ahora, sin trascender su pensamiento en el tiempo y en el espacio, quedan anclados en ese claro-oscuro de verdad y engaño. El niño acepta ser lo que no es. Porque el sentido de realidad pasa por el no tener y no poder. Los espacios reales los hace espacios fantaseados, creados a partir de otro mundo fuera de su alcance.

La televisión como aparato, es la prolongación de nuestro glóbulo óptico, sin embargo, no es el aparato lo que se discute sino su uso; esto se convierte en una cuestión filosófica al estilo cartesiano porque se vivencia como sensorialidad, el espectador no se presenta como “yo pensante”, sino como “yo corporal”, un dominio de lo externo por encima de la interiorización; al discutir sus aplicaciones, sus productos se transforman en obstáculos epistemológicos para desentrañar la realidad, al tener un conocimiento vulgar, por el derroche de imágenes pintorescas y fáciles, éstas sólo se describen y se cree que se comprenden, las falsas explicaciones y su vinculación con mitos e irracionalidades, con estos obstáculos se crea una cultura perezosa, porque su punto de partida no es la realidad real, sino la realidad virtual, anónima, sin rostro, que se desvanece o aparece digitalmente; porque se juega con el tiempo y el espacio, desde lo prehistórico hasta el futuro lejano.

Con las piezas de información contradictorias no se logra con rapidez una diferenciación progresiva e integración reconciliadora para lograr una identidad, a través de la confianza la autonomía y el ingenio. Un camino fácil es la substitución, entendiéndose como la distancia más corta en aceptar como propias las creencias y actitudes de los demás, en este caso los personajes de su realidad virtual.

V. Televisión y diálogo
La televisión crea una atmósfera de imposibilidad de diálogo, no lo incita, no es portadora de diálogo, lo interrumpe, pero como genera un goce, una pasividad hipnótica, ésta se transforma en adicción. Hoy están los niños tele-adictos con el crecimiento natural del tejido adiposo que tiende a repercutir en la autoimagen corporal, en donde lo obeso se siente como impuro, que choca con el culto a la corporalidad de lo estético.

Con la llegada de la era digital, la televisión transforma a sus integrantes, ellos pueden suprimir la realidad que le rodea al oprimir un botón. Se establece un pseudodiálogo televisión-espectador, porque existe la facilidad de establecer el cambio sin cambiar. Entonces los niños y las niñas están hechos a imagen y semejanza de sus programas favoritos a través del mimetismo y la imitación inconsciente porque incide sobre la esfera afectiva, más que la intelectual. La atmósfera familiar se circunscribe en esa prolongación televisiva a toda la bioecología (micro, meso, exo, macro y cronosistemas), en el cuarto, ropa, accesorios y fiestas de aniversarios, el personaje no se negocia, se impone, incluso por los eternos niños.

Sin la televisión está la nada, se acaba el muletaje. De pronto se percata que no hay tema de conversación, si no es sobre los programas televisivos. Encontrarse consigo mismo, en sus soliloquios, pero si no hay mucha vida interna, éstos son anómalos. La televisión no promueve la vida interna, es el consumo cómodo de pasar el tiempo. Además, por evolución psicológica hay una superioridad del material pictórico (en imágenes) sobre el verbal de mediación semiótica. La frase de una “imagen vale más que mil palabras” y es la única palabra válida para los tele-adictos.

Se puede considerar que lo dominante en los niños y en las niñas es el culto a la imagen. La televisión ocupa el trono central en las habitaciones familiares, se rinde pleitesía y se apologiza los programas. Ésta se convierte en amo cruel. Ésta es la triste caracterización de nuestra época. La escuela utiliza los personajes televisivos para la enseñanza; la forma se convierte en contenido. Basta que un personaje se ponga un accesorio corporal, utilice una palabra o frase o una canción para que uniformice a todo un sector social y los docentes lo incorporen a sus rutinas escolares.

Los libros están en el rincón del olvido, porque los textos han sido sustituidos por iconos. Se maneja una conciencia ahistórica, el presentalismo es la imagen que todo cambia para que todo siga igual y no se esfume. Un héroe es sustituido por otro, una serie televisiva es sustituida por otra sin etapa previa de duelo y sin remordimiento, es la fugacidad del tiempo presente, lo tengo o lo dejo. No hay pasado, no hay futuro, por lo tanto no hay historia. Con la misma rapidez con la que el icono se materializa, en esa misma proporción se desvanece.
En el culto a la imagen, la televisión es la nueva literatura, las caricaturas suplen a la lectura y la síntesis del mensaje es el video clip. Para qué leer los cuentos y deleitarse en un diálogo con el autor, es más placentero su asistencia al cine o escucharlo en un libro-cassette. La lectura y escritura donde intervienen más procesos cognitivos son sustituidos por la comodidad de los iconos. En los libros hay interioridad, el lector crea la imagen y fantasea con los personajes. Con los libros se interviene en lo afectivo, cognitivo y volitivo en términos reflexivos y metacognitivos.

También existe el culto a la sensorialidad, la máxima cartesiana: pienso, luego existo, no tiene lugar aquí, está siendo sustituida por siento, luego existo. El pensamiento es eliminado como proceso para darle cauce a lo que digan los sentidos. Estos dos cultos (imagen-sensorialidad) impregnan la vida infantil y del adolescente produciendo una globalización de identificación lingüística e icónica allende las fronteras. La transculturación es una realidad producto de los medios masivos de comunicación que están llevando a un conformismo generalizado y por lo tanto la caverna platónica (vivir en el mundo de las imágenes) se vuelve cada vez más real.

* Licenciado en Psicología, por la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS); tiene maestría en Psicología Genética y Aprendizaje Escolar por la UAS. Actualmente se desempeña como profesor e investigador de la Escuela de Psicología de la UAS.
** Estudiante del noveno semestre de la licenciatura de Psicología en la UAS.
Nota: Este trabajo forma parte de la Memoria del V Congreso Estatal de Investigación Educativa: Los medios masivos de comunicación y su influencia en la educación, realizado en mayo de 2002 y coordinado por el Centro Estatal de Investigación y Desarrollo Educativo de Sinaloa (CEIDES).


Las nuevas tecnologías en el aprendizaje de una lengua extranjera


María Luisa Pereira Hernández*

En la actualidad podemos encontrar a las nuevas tecnologías en casi todos los espacios de la vida cotidiana de las realidades urbanas, donde ya no son sólo instrumentos de procesamiento y transformación de la información, sino también medios comunicativos. Así, las nuevas tecnologías pueden ser definidas como 'el conjunto de procesos y productos derivados de las nuevas herramientas (hardware y software), soportes de la información y canales de comunicación relacionados con el almacenamiento, procesamiento y transmisión digitalizados de la información' (Adell; 2001). En este sentido, diversos estudiosos del fenómeno coinciden en que las llamadas nuevas tecnologías de la información y la comunicación (NTIC) han introducido cambios en la sociedad al producirse el tránsito de una cultura de mass media a una sociedad en red, multimediatizada, modificándose las pautas de convivencia y la percepción de tiempo/espacio/relación social.

Las nuevas tecnologías también han afectado a los sistemas educativos; éstas se han ido integrando en los planteamientos pedagógicos y didácticos de las distintas áreas y niveles educativos. La aparición de la computadora personal y la Internet han permitido un cambio cualitativo en la medida que se dan mayores posibilidades para el trabajo y necesidades individuales.

Por otra parte, tendencias como la flexibilización del currículum, la descentralización, la aplicación de enfoques interactivos y construccionistas, la importancia en la diversificación y personalización, así como la percepción de sujetos activos y la internacionalización y globalización en el campo de la educación, son expresiones del desarrollo de la sociedad en red (Pérez Tornero; 2000:27).

En nuestro país y particularmente en Sinaloa, la aplicación de las nuevas tecnologías en la educación es todavía incipiente, pues no se les ha aprovechado en toda su potencialidad. No sólo por ser aún inalcanzables para muchos mexicanos e instituciones, sino por el desconocimiento y la percepción que existe acerca de estos medios. En general, se desconoce toda la gama de proyectos educativos que pudieran ser factibles gracias a ellos.

Las nuevas tecnologías utilizadas en la educación pueden despertar el deseo de aprender, además de utilizar los conocimientos y la capacidad del pensamiento, a través del desarrollo de las habilidades de autopreparación forjadas en el estudiante. “Bien empleado puede ser un medio eficaz en la educación y en la enseñanza” (Govantes; 2001).

Cabe aclarar, sin embargo, que la inclusión de las nuevas tecnologías en la educación no producen cambios automáticos en el proceso de aprendizaje ni se da necesariamente de la misma forma en todas las instituciones. El uso de las nuevas tecnologías en la enseñanza precisa cambios en el diseño de las situaciones de aprendizaje a partir de principios como los que señala Cabero: basarse en la participación y responsabilidad del alumno en su proceso de formación, favoreciendo un modelo de trabajo autónomo e independiente, así como flexible, permitiendo una organización acorde a las necesidades y características particulares de cada receptor, además de favorecer la interacción con y a través de los medios tecnológicos, centrando la construcción de aprendizajes significativos (García; 2001).

El impacto de las nuevas tecnologías dependerá del contexto sociohistórico en que se inscriban. Es necesario reflexionar acerca de su uso. Ser conscientes que la tecnología no resolverá los problemas educativos en un abrir y cerrar de ojos y que en sí misma no garantiza el proceso de aprendizaje, ni produce egresados autónomos y responsables de su propio conocimiento. La tecnología debe ser vista como un medio que posibilite y mejore los procesos de aprendizaje contextualizándola más allá de su propio terreno, desde una posición reflexiva y crítica.

El objetivo de la investigación es elaborar una propuesta para que el aprendizaje de una lengua extranjera, específicamente del idioma Inglés, en el marco de las instituciones integradas al sistema educativo, sea más atractivo, fácil, ameno, comprensible, dinámico y creativo, con la ayuda de las nuevas tecnologías. Se pretende también contribuir a la formación de un nuevo campo educativo en el área del aprendizaje de una lengua extranjera, donde exista una implicación mutua entre los procesos comunicativo educativo a través de las mediaciones tecnológicas con la elaboración de un software educativo.

Pretende construirse el problema de investigación partiendo de interrogantes tales como:

¿Qué tan efectivo sería trabajar las cuatro habilidades de la lengua: la comprensión auditiva, la expresión oral, la comprensión lectora y la expresión escrita, con las nuevas tecnologías en el proceso enseñanza del idioma inglés de nivel secundaria?
En el ámbito del aprendizaje de una lengua extranjera, como el inglés, los recursos didácticos son de suma importancia. Además de prácticas como el intercambio estudiantil, la utilización y combinación de medios como la radio, la televisión, el cine, programas digitales de multimedia, la Internet, los libros de texto y material auténtico de la lengua, pueden proporcionar un ambiente de aprendizaje que le brinde mayores recursos al estudiante.

Sin embargo, en muchas de nuestras instituciones educativas de todos los niveles (básico, medio superior y superior) los docentes continúan trabajando con las mismas técnicas de hace ya varios años. Actualmente, la herramienta indispensable del maestro es el libro y el cuaderno. Miles de ejercicios de escritura y de lectura son proveídos al aprendiz, quien generalmente egresa con pobres habilidades para comprender y expresarse oralmente. Es la hora de hacer un cambio. No hablamos de sustituir al libro y al cuaderno de trabajo, ni de marginar la práctica de lectura y escritura, sino de aprovechar los nuevos medias que cuentan con múltiples posibilidades para el diseño instruccional de cualquier programa de estudios. Estamos de acuerdo conque los cursos de lengua extranjera deben desarrollar, de manera equilibrada, las cuatro habilidades de la lengua, tratando de que se relacionen entre sí como continuación una de la otra, y qué mejor manera de que el alumno logre desarrollar estas habilidades comunicativas con el uso de los nuevos medios.

En México, los programas oficiales correspondientes a la enseñanza de un idioma extranjero, se fundamentan en un enfoque comunicativo, el cual exige que el profesor desarrolle permanentemente técnicas que respondan mejor a los requerimientos actuales de comunicación e información de los alumnos (Hierro: 1994:13). Este tipo de propuestas se hallan identificadas con las teorías cognitivas que reconocen al aprendizaje como un proceso creativo de descubrimiento, expresión y desarrollo personal.

Desde nuestra perspectiva de estudio, se analizará si el enfoque comunicativo utilizado en la enseñanza de lenguas extranjeras se basa principalmente en dos teorías: la teoría del aprendizaje de un idioma extranjero y la teoría de la descripción de un lenguaje. La primera teoría, explica cómo se aprende una lengua extranjera considerando al alumno como eje principal del proceso, capaz de deducir reglas del uso de la lengua para posteriormente elaborar sus propios enunciados. Dentro de este enfoque, se piensa al estudiante como un ser con capacidades cognoscitivas pero también como un ser afectivo, con experiencias emocionales y sentimientos que inciden en el proceso de aprendizaje.

Para la segunda teoría, la lengua es un instrumento de comunicación. Aquí se enfatiza la función del uso del idioma, subordinándose la estructura forma; dado que, se sostiene, la forma del idioma se adquiere a través de su uso. Para este enfoque, la gramática debe enseñarse implícitamente y los alumnos deben “generar producciones de lengua originales en lugar de manipular formas prefabricadas” (Hierro; 1994:13). En este sentido, se expresa que desde el enfoque comunicativo es necesario conocer las reglas del funcionamiento de la lengua, es decir, la gramática, pero, es indispensable, sobre todo, conocer el uso del idioma.
Siguiendo el enfoque comunicativo, entonces, es posible observar que un diseño instruccional basado sólo en los medios tradicionales como el libro y el cuaderno, y aún en medios masivos de comunicación (vídeo, radio, televisión, prensa), no tiene el mismo impacto el aprendizaje de una lengua extranjera que utilizando los nuevos media digitales e interactivos.

Se sugiere que en un panorama social donde predomina la imagen, y la información es sinónimo de poder, es básico cultivar el potencial didáctico del sistema multimedia para actualizar tanto a los procesos educativos como al educador, así como a los programas y estrategias de estudio. En nuestra actualidad las prácticas comunicativas van más allá de la del lenguaje dominante en la enseñanza, por lo que tenemos que incrementar nuestras capacidades lingüísticas y comunicativas con las que enseñamos en las escuelas para lograr que las articulaciones expresivas que se dan por medio de la relación educador-educando sean de más fácil comprensión (Pérez; 2000:9596).

Las nuevas formas de interacción en la educación se lograrán por las mediaciones tecnológicas, donde estará presente el flujo de información, la interacción, el intercambio y la cooperación entre los individuos, teniendo en claro la significación de las competencias comunicativas. Algunas de las posibilidades que se pueden utilizar para maximizar el aprendizaje de una lengua extranjera son los programas de software educativo, donde se pudieran plantear situaciones reales de la vida de una familia inglesa cualquiera, teniendo la posibilidad de escuchar las conversaciones un sinnúmero de veces, leer al mismo tiempo los textos en la pantalla, repetir el diálogo a una velocidad más lenta, grabar por medio de un micrófono su propia voz para comparar su pronunciación con la de los actores y redactar sus propios diálogos. Los conceptos a estudiar irán desde los grupos nominales y verbales hasta las funciones de lenguaje: expresión oral, expresión escrita, comprensión auditiva y comprensión de lectura.

El desarrollo metodológico del trabajo de investigación parte de reconocer el hecho de que, para lograr avances significativos en la elaboración de software educativos, es necesario incluir no sólo a los expertos en informática sino también a un equipo de trabajo interdisciplinario donde se combinen los especialistas en programación de software con los conocedores de la enseñanza de la lengua y teorías educativas.
Para llevar a cabo el proyecto de investigación será necesario realizar una investigación documental, después realizar observaciones de grupos experimentales donde utilicen un software educativo para la enseñanza del idioma inglés, así como grupos de control, a efecto de analizar los resultados obtenidos y compararlos con entrevistas previas realizadas tanto al alumnado como al profesorado.

El aprendizaje de una lengua extranjera debe ser conceptualizado desde un enfoque comunicativo, y es importante que se ponga en práctica una nueva propuesta de enseñanza de una lengua extranjera en secundaria, dado que el alumno, así como la sociedad en general, ha cambiado; existe una nueva manera de comunicarnos y es a través de las nuevas tecnologías. Es necesario que el educador tenga los conocimientos necesarios para aprovechar al máximo los recursos tecnológicos que ahora existen.

Los sistemas que se pueden llegar a utilizar en una computadora personal, aparte de hacer las sesiones de estudio más personalizadas, las harán más dinámicas y por lo tanto más efectivas siguiendo los objetivos del programa académico de las escuelas secundarias, que permita que el alumno llegue a desarrollar habilidades comunicativas como son: comprensión auditiva, comprensión lectora, expresión oral y expresión escrita.

* Licenciada en Ciencias de la Comunicación, por la Universidad de Occidente, Campus Culiacán; es estudiante de la maestría en Educación y Nuevas Tecnologías en el Centro de Investigaciones y Servicios Educativos de la Universidad Autónoma de Sinaloa. Actualmente se desempeña como maestra de enseñanza de lengua extranjera en las Escuelas Secundarias Técnicas 1 y 75 de Culiacán, Sinaloa.




Elsa Verónica González Robles*

Introducción
Nos encontramos en una época que se caracteriza por la incorporación de las Nuevas Tecnologías de la Comunicación y la Información en la mayoría de los ámbitos del conocimiento y del quehacer humano. Actualmente la educación vive un verdadero cambio de paradigmas distinguido por la modificación de enfoques (desde el conductismo al cognitivismo y, más recientemente, al constructivismo); sin embargo, la educación se muestra en ocasiones perpleja al experimentar este cambio y enfrentarse a nuevos retos que vencer a la hora de concebir usos educativos de estas tecnologías bajo los enfoques pedagógicos y teorías actuales. Pero aun cuando los retos parezcan difíciles y a veces imposibles, la nueva educación debe reflexionar sobre las formas de incorporar las tecnologías con pertinencia para el mejoramiento de la calidad de la educación.

Actuales esfuerzos para una mejora educativa
El sistema educativo en México no puede permanecer indiferente ante el desarrollo tecnológico, pues éste forma parte del medio en el que se encuentra inmerso. Se han hecho intentos por incursionar en el uso de los medios tecnológicos y como resultado de ello, en la búsqueda por implementar la tecnología de una mejor manera, han surgido programas dentro del sector de educación básica en México como: Red Escolar, Red Edusat, Videotecas, etc.

Estos programas han dado un giro significativo a lo que hace poco más de 10 años era el sistema de educación básica, de una educación tradicionalista al planteamiento de una práctica docente innovadora en que se da oportunidad de participación activa al alumno. Hoy en día es raro encontrar niños y/o adolescentes que no los conozcan. Este tipo de programas da por resultado una educación más integral a lo que se considera el sistema de educación clásico.
A pesar de que estos programas han sido de gran utilidad en la labor docente, el profesor no siempre cuenta con el tipo de apoyo, material ideal para su práctica educativa que desearía tener. Entre ese material ideal está el soporte que le brindaría el uso de software educativo, espacios virtuales de interacción que le permita el cumplimiento de objetivos que en determinados momentos desea cubrir.

Apoyando en la mejora educativa
En Internet existe una diversidad de material y recursos, particularmente “software educativo”: enciclopedias, juegos interactivos, tutoriales, etc., sitios de chats, bibliotecas virtuales, foros de discusión, pero, ¿este material y recursos realmente favorecen el proceso de enseñanza aprendizaje? ¿Los contenidos del software en su mayoría, son acordes a las teorías y enfoques pedagógicos vigentes? ¿Están centrados en el desarrollo de estrategias de aprendizaje? ¿Los sitios virtuales de interacción, están siendo utilizados con fines educativos?

Por lo general, la respuesta en el mayor de los casos es negativa, quizás porque la finalidad de quienes se dedican al desarrollo de estos recursos, es en su mayoría comercial y el sentido de su desarrollo no está centrado prioritariamente en el aprendizaje, es como si quisieran implantar una moda más que el satisfacer una necesidad.

Con esto no quiero decir que todo lo que el profesor encuentre en Internet sea negativo y de mala calidad, puesto que gran parte del éxito que el profesor en dado momento puede obtener con ellos, depende de la planeación y uso pertinente que haga de los mismos.

Pero qué mejor que facilitarle un tanto ese buscar y encontrar algo acorde a sus necesidades con un sitio exclusivo en el que, además de encontrar material y recursos disponibles para su uso, pensados para la mejora del proceso educativo, encuentre un sitio en el que esté la invitación abierta para su participación en el diseño de sus contenidos.

Si bien los profesores cuentan con “Internet”, recurso que los apoya dándoles libertad de búsqueda de material que se encuentra en línea, por qué no contar con un sitio exclusivo con material que cubra la mayor parte de la necesidad. Un sitio en Internet en el que pueda tener una opción, pero una opción creada en su mayoría a la medida de sus necesidades.

Un sitio con apoyos didácticos del tipo de “Software Educativo” y “Espacios de Interacción”, es decir, con un área, la cual esté ahí, esperando su acceso durante las 24 horas del día, durante los 365 días del año y desde cualquier lugar.

Un Sitio de Apoyo Didáctico en Línea cuyo objetivo principal gire en torno a una mejora en el proceso de enseñanzaaprendizaje, brindando elementos necesarios que apoyen en las diversas temáticas, mismas contenidas en los planes y programas de estudio de educación básica. Un sitio en donde profesor y estudiante tendrán un sitio de reunión en común.

Cabe mencionar que en el proceso de desarrollo de algo así, la incursión del docente será indispensable para el diseño de contenidos y estrategias pedagógicas que favorezcan el proceso de significación; por lo tanto, además de promover el uso de los contenidos por parte de los profesores, será otro de los objetivos de este proyecto.

El enfoque alternativo en lo referente a educación a distancia se centra en la capacidad productiva con la participación de diferentes mediaciones pedagógicas [Huergo, 2000]; pues bien, la conceptualización del esquema anterior parte de este supuesto que propicia de alguna manera que el proceso actual de enseñanza-aprendizaje sea activo.

El proceso actual de enseñanza-aprendizaje debe caracterizarse por involucrar al alumno. El profesor ya no es el transmisor de conocimientos sino el mediador que facilita la comprensión, entendimiento y significación de contenidos, propiciando el desarrollo de destrezas. Actualmente el poder utilizar las nuevas tecnologías desde los enfoques y teorías pedagógicas pertinentes favorecen tal proceso.

Desde el enfoque sociocultural, la labor del mediador es la de propiciar el desarrollo de la competencia intelectual del aprendiz. Se entenderá la mediación como la experiencia de aprendizaje donde un agente mediador, actuando como apoyo, se interpone entre el aprendiz y su entorno para ayudarle a organizar y a desarrollar su sistema de pensamiento y facilitar la aplicación de los nuevos instrumentos intelectuales a los problemas que se le presentan [Ríos, 1997].

El Sitio de Apoyo Didáctico en Línea, será utilizado por el profesor y el alumno como apoyo y además podrá ser enriquecido por el profesor, que determinará con asesoría de especialistas (pedagogos, psicólogos y programadores) el diseño del mismo, de acuerdo a contenidos de los planes y programas de estudio vigentes.
No se debe dejar esta tarea al programador, al pedagogo, al psicólogo y al profesor por separado, por lo que se deben conjugar logrando el carácter interdisciplinario, lo que permitiría el equilibrio entre producción y recepción, como lo marca el proceso de significación [Fuentes Navarro, 2000].

De lo anterior, me surgen posibles hipótesis que resumo en lo siguiente:

• Un sitio con material y recursos de apoyo didáctico apoyará en gran medida las temáticas de los planes y programas de estudio siempre y cuando éstas permitan su diseño.
• El “Software Educativo” que se proporcione en un sitio así, complementará ciertas temáticas de una mejor manera en tanto el profesor se involucre en el diseño de contenidos y estrategias de uso.
• Con la disposición del profesor, principalmente, es que el contenido (material y recursos) en línea será realmente útil al ser empleado para buscar elevar la calidad de la educación que se imparte en el nivel de educación básica en nuestra entidad.


En los supuestos anteriores enfatizo en todo momento el valioso apoyo del profesor, que como usuario principal puede brindar, dado que el enfoque que le doy a mi propuesta está centrado en satisfacer la necesidad de apoyo docente, con material y recursos didácticos diseñados a la medida de sus necesidades, donde estará dada al involucrar al profesor en el desarrollo y enriquecimiento de los mismos, esperando como resultado favorecer el proceso de enseñanza-aprendizaje.


*Licenciada en Informática, por la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS); es estudiante de la maestría de Educación y Nuevas Tecnologías, en el Centro de Investigaciones y Servicios Educativos de la UAS. Actualmente se desempeña como programadora de software educativo en el Departamento de Tecnología Educativa de la SEPyC-Sinaloa.

 

 

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