LA OBRA DE
CRISTO HOY EN DIA
Cuando el Señor subió para estar a la diestra de la majestad en el cielo, su obra en la Tierra continua.
Marcos dice:
“OBRANDO
con ellos el Señor y confirmando la palabra con las señales” Marcos 16:
20
De esto se da testimonio en el libro de los hechos de los apóstoles.
Esta obra o
trabajo nunca se detuvo, ni fue alterada jamás, porque siempre estuvieron
presentes 4 elementos que lo hacen posible desde el principio:
El
Espíritu de Cristo
El espíritu Santo vino tal como Jesús lo prometió y vino en su nombre.
El dijo: “Tomará de lo mío y os lo hará saber... El os guiará a toda verdad” Juan 16:13-15
El Espíritu Santo es el Espíritu de Cristo y siempre ha estado activo, nunca se dio vacaciones. Aunque siempre ha habido quienes han negado su obra y le han resistido hasta HOY.
El Espíritu
de Cristo es el que hace las obras en el Nombre de Cristo por medio del Cuerpo
de Cristo que está aquí en la Tierra.
La Iglesia de Cristo es su cuerpo. Todos los redimidos por la sangre de Cristo, que creemos en su Nombre y que son movidos por su Espíritu somos el Cuerpo de Cristo.
El siempre ha
tenido un pueblo en la Tierra, una manada que le sirve y que le es fiel; La
Iglesia nunca desapareció de la Tierra porque el Espíritu de Cristo le da
vida. Aunque en ciertos momentos su accionar no ha sido notorio, siempre estuvo
presente. Lo que sucede en los últimos tiempos es un mover extraordinario,
porque se avecina el fin.
La Iglesia de Cristo, como pueblo o nación tiene una bandera, una bandera de guerra o estandarte: El Nombre de Jesús el Cristo. En ese Nombre hay autoridad. Solo a la Iglesia de Cristo le corresponde por derecho usar este Nombre por cuanto es su esposa.
Jesús dijo: “Estas señales seguirán a los que creen” (a los creyentes). EN MI NOMBRE echarán fuera demonios, hablarán nuevas lenguas...”
Todo en su Nombre. Por ningún motivo la Iglesia puede usar otro nombre que no sea de Cristo el Señor.
Jesús dijo: “Si vosotros permaneciereis en MI PALABRA seréis verdaderamente mis discípulos y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres” Juan 8: 31-32
La Palabra de Dios para este tiempo es la Palabra de Cristo.
“Dios habiendo hablado muchas veces, y en muchas maneras, en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros día nos ha hablado por el Hijo, al cual constituyó heredero de todo”
Hebreos. 1:
1-2
En las
Sagradas Escrituras tenemos que saber distinguir la palabra que fue establecida
para los antiguos y la que nos corresponde a nosotros los discípulos de Jesús.
El dijo:
“Oísteis
que fue dicho a los antiguos... Pero YO os digo”
Mateo 5: 21
La Iglesia de Cristo siempre ha subsistido gracias a la palabra de Cristo, que le alimenta y fortalece. Porque todo lo que él hace, lo hace mediante su Palabra y mediante su Espíritu a través de su Cuerpo que lleva su Nombre.
Cuando el Espíritu de cristo llenó a los 120 en Jerusalén, entonces el Cuerpo de Cristo se puso en acción, todos comenzaron a adorar a Dios en Espíritu y en verdad, según el Espíritu les guiaba.
Pedro comenzó
a hablar la Palabra de Cristo; y a los que la oyeron y la creyeron les ordenó
que se bauticen en el nombre de Cristo y les dijo que también les correspondía
recibir el Espíritu de Cristo. Los que obedecieron vinieron a ser parte del
Cuerpo de Cristo. Hoy en día es lo mismo y será hasta el fin.