A ESCONDIDAS
Porque aquel día que llegaste
yo era tímida, con miedo.
Aunque cuando vi tu mirada
me di cuenta que eras bueno.
Luego empecé a ver todos los días
tu rostro y tu alma de angelito.
Y mientras va pasando mi vida
más te quiero, más te río.
Aunque sonrisa pasajera
cuando tus ojos iluminan mi rostro.
Para que no haya sospechas
de que te amo, que te adoro.
Aunque esto no lo sabes
yo te quiero, a escondidas.
Pero claro, no lo digo
porque no tiene sentido.
De repente yo te veo
que me miras, que me observas.
Al quererte yo me pierdo
en tus ojos, en tu risa.
Yo te quiero pero soy
una amiga más en tu vida.
Una chica que te amó
y que te ama, a escondidas.
Noelia Soledad Demichelli.
San Justo, Buenos Aires.
Miércoles 09 de Agosto de 1995.