¡POBRE ÁRBOL!
Yace muerto en la calle
el pobre árbol olvidado.
La gente indiferente...
Nadie sabe -ni les importa-
quién lo ha matado.
De sus ramas nunca más
florecerá la vida eterna.
Y al gentío que pasa...
No le interesa.
Y nadie lo entierra.
¡Pobre árbol que un día
le dio vida a la calle muerta!.
¡Pobre árbol que está muerto
y ya nadie lo recuerda!.
Noelia Soledad Demichelli.
San Justo, Buenos Aires.
Martes 22 de Junio de 1999, 06:10 A.M.