XXXVII

 

Me tocó vivir en este mundo

de una pura agresividad

lleno de grandes decepciones

y una constante adversidad

que me deja confusión

y una dulce ambigüedad.

 

Y hoy puedo asegurar

que no es casualidad

que en esta ciudad

no haya libertad;

sólo disconformidad

y ganas de gritar.

 

En estos nuevos tiempos

sobra la deshonestidad,

ese monstruo enorme

que adoptó la comunidad

y que hoy camino un sendero

repleto de falsedad.

 

Y hoy puedo asegurar

que no es casualidad

que en esta ciudad

no haya libertad;

sólo disconformidad

y ganas de gritar.

 

Apenas perceptible suena

la palabra amistad

entre seres que sólo tienen

una delicada crueldad,

entre gente que sólo usa

la ley de la brutalidad.

 

Y hoy puedo asegurar

que no es casualidad

que en esta ciudad

no haya libertad;

sólo disconformidad

y ganas de gritar.

 

Noelia Soledad Demichelli.

San Justo, Buenos Aires.

Viernes 28 de Julio del 2000, 03:35 hs.

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