Han pasado tres años desde que los Oblatos de la provincia de Jaffna pusieron en marcha una misión de ayuda en aquellos campos del área de Cheddikulam, donde 238.000 personas de los frentes de guerra de Vanni en Sri Lanka se instalaron en los refugios temporales detrás de alambres de púas. A principios de febrero de 2009, la gente comenzó a huir de la guerra presente en la parte noreste del país hacia zonas controladas por el ejército. Las fuerzas gubernamentales los llevaron hacia Cheddikulam, una región en el centro-norte del distrito de Vavuniya. El Padre Celestine MASCHRINGHE, que era el sacerdote de la parroquia, actuó con prontitud para atender a la gente, pues ellos no tenían nada, excepto sus propias vidas. Los Oblatos del barrio también se presentaron en el lugar para unirse a la labor de socorro. Finalmente, una operación de ayuda en gran escala fue llevada a cabo por los oblatos. Cheddikulam, por naturaleza, es una zona de la misión en el extremo mas alejado de la Diócesis de Mannar, que comparte su frontera con el distrito central y con la Diócesis de Anurathapura. Al estar en la frontera, ésta se ha visto gravemente afectada por las tres décadas de guerra civil. Un buen número de gente de ese lugar son, o bien colonos tamiles del sur, o pobladores que regresaron después de que se calmó la relativa situación en la zona. Ahora se ha convertido en un refugio para las masas que huyen del norte.

Misioneros OBLATOS DE MARIA INMACULADA