[Inicio
[Tutoriales
[Amor en la Web
[Poetas
[Contacto




A m i s t a d e s V i r t u a l e s

Si queremos copiar un programa en la red, debemos firmar primero los Términos de Responsabilidad. Si queremos instalar en la computadora un programa, debemos antes aceptar las condiciones del fabricante. El único espacio que está desprotegido hasta hoy son las relaciones entre personas que, habitando ciudades o países diferentes, tienen apenas como garantía la palabra virtual que llega desde el otro lado de la pantalla. Por que no instaurar un Término de Responsabilidad, que delimite la calidad de la relación entre distantes desconocidos?

No se si ayudará mucho, mas creo que ayudará algo. Aquí un modelo para análisis y debate.

Declaración de Intenciones

Puedo ser hombro. Puedo ser oyente, intelecto, muleta, fuerza. No sólo puedo -como también quiero- ser paraguas, refugio, puente, abrazo.

Aspiro tender un cordón umbilical entre tu prosa y mi verbo, entre mi decir y el tu sentir. Deseo ser la bomba que explota en mil pedazos los obstáculos que impidan tu libre transitar en el camino que te conduzca a tu puerto de destino.

Quiero ser Amigo/a, usando para tal efecto todas las armas, las mañas, las artimañas, los artificios, las mentiras y verdades que fueran necesarios.

Como en el sexo circunstancial, también en la Amistad virtual quiero que impere la misma regla: no vale decir te amo, ni beso en la boca.

El sentimiento, en las personas receptivas, doloridas, pensantes, es un canal en el cual navegan barcos de diversos calados y antagónicos destinos. Por eso quiero escoger embarcar en el navío que me lleve al puerto de la complicidad el territorio de la Amistad, en no amarrar la canoa al pié de la cama de los amantes.

Busco un mar calmo donde pueda navegar sobre lágrimas de felicidad y lamentos de dolor; donde a veces sea el sufrimiento, y a veces el bálsamo; donde unas veces sea lágrima, y otras tantas, sabana.

Quiero dibujar un proyecto en el cual quepa apenas la honestidad de propósitos, y del cual sean desterradas la promesa fácil y los juramentos mentirosos.

Esa, es la travesía virtual que te propongo. Sin declaraciones de amor, mas con gestos concretos de amistad. Principalmente, sin castillos de arena ni castillos en la arena.

Una caminata, apenas una caminata. Esa es mi oferta. Esa mi única y última palabra.

(Aceptar esta Declaración de Intenciones es condición sine-qua-non para que el contacto se establezca entre las partes. Sino fuera aceptada en su integridad, quieras borrar de tu computadora la dirección electrónica de la otra parte).

P.S.: Se Aceptan sugestiones

Apendice a la declaración de Intenciones

La relación que se establece en el mundo virtual puede ser inconsecuente, consecuente, esporádica o duradera. Puede ser amena, superficial, profunda, rotunda. Puede derivar para una amistad parcial o integral, para un compañerismo virtual o real el que no puede, por inviable, es que surja, lozanía, florezca, se establezca, cualquier tipo de relación que remotamente se parezca al amor, sea en el contenido como en la forma, en las palabras o en los silencios que se cambian vía Internet, ya sea por chat, e-mail, ICQ, PowWow, o cualquier otro medio electrónico que apenas sirva para transmitir y recibir mensajes de/para ilustres desconocidos. La virtualidad es realmente virtual, y vive lejos de la Realidad.

Y nada de eso, sin embargo, impide que la amistad germine, ni que el compañerismo adquiera forma y contenido, pues amistad y compañerismo son sentimientos manejables a la distancia, sin necesidad de tocar, ni de ojo en el ojo, ni de boca en la boca.

Quien no respetar las reglas del juego virtual pierde el derecho de después decir "yo no sabía".

Todo eso no significa que no se pueda saltar de la virtualidad para la realidad. Quien pueda, y quiera, tiene las puertas abiertas. Mas, lo que de ahí en adelante suceda no tiene ninguna relación con la tecnología, o los bytes y megabytes. Ahí, el asunto es otro, pues forma parte del ámbito de la privacidad de cada uno.

En el mundo de la fantasía cibernética, el único antídoto es el viejo y baqueteado "ver para creer".

Bruno Campel (Suécia) Suécia, 1998

www.ArgentinasDesigns.com.ar
Copyright ©Argentina's Designs 1998/2008. All rights reserved.
 
Hosted by www.Geocities.ws

1