Intimidad

Invisible, es mucho más fácil para la mayoría de las personas entrar en conversaciones íntimas. Frases como "te amo", o "me dejas loco", que son muy comprometedoras si dichas cara la cara, se vuelven frecuentes. La relación físicamente distante facilita los intercambios de elogios y propuestas sexuales. Al final, si el otro no fuera receptivo, es posible apagar o cambiar de canal. En última caso, se cambia de sobrenombre o de canal de chat y se finge que nada sucedió. Los rechazos, por esto, duelen mucho menos. Eso decide a cualquiera a ser más audaz, y hace que las declaraciones de amor sean mucho más fáciles de hacer que en la vida real.

Personas con carencia afectiva (finalmente, casi todos lo somos), pueden quedar fácilmente envueltas por el aura sensual y cariñosa que aparece en los chats y mensajes.

Mujeres que buscan confidentes para desahogar cosas que mismo entre las amigas reales no se permiten, encuentran el canal abierto para eso. Al final, todas están, en cuanto conectadas, disponibles a un diálogo, lo que no sucede en la vida real.

Si la persona no estuviera preparada para ese tipo de relación, más sensual e intima, que sucede en los chats, hay grandes chances de relación afectiva verdadera, que, con grandes posibilidades, terminará en decepción.

Los "levantes" virtuales hacen parte de un juego de seducción. Y es en ellos que las personas ejercitan su lado conquistador, experimentando palabras, abordajes, actitudes, que muchas veces acaban sirviendo como fuente de inspiración para los abordajes de la vida real. Como el feed-back es mucho más inmediato y menos doloroso, por no contar con el enfrentamiento físico, cada experiencia sirve como aprendizaje para "conquistas" futuras. Personas tímidas, inseguras, encuentran aquí un canal para colocar sus sentimientos sin (o con pocos) riesgos

Léa Waidergorn Storch