Título:
Mi príncipe especial
Autor: chibineko
Nota: Los personajes de esta historia pertenecientes a la serie "Card
Captor Sakura" pertenecen al grupo CLAMP y Kodokawa Shoten.
Capítulo
IV: Solo un poco de amor
Sakura y Adry se encontraban justo
enfrente del enorme portón que estaba como entrada en la parte delantera
del gran castillo. Sakura revisó y trató por todos los medios,
pero el portón no se abría, por que no se le ocurrió traer
a la carta Power con ella T_T.
"No pierdas tu tiempo allí; vamos, yo conozco otra entrada"-
dijo la pequeña Adry con su chillona vocecita de siempre; tras lo cual
guió a la niña hasta el extremo izquierdo del castillo donde se
encontraba una pequeña entrada.- "No es exactamente la entrada más
elegante, pero sirve".
Sakura miró a Adry y sonrió asintiendo, tras lo cual las dos se
escurrieron por la pequeña entrada de manera cautelosa.
Una vez dentro, ambas comenzaron a caminar de la manera más silenciosa
posible, cuando un sonido hizo que Sakura se tornara roja de los pies a la cabeza.
"Lo siento, es que tengo hambre *^_^*"- dijo Sakura con algo de vergüenza.
Adry miró a Sakura, y justo en ese preciso momento su estómago
comenzó a hacer los mismos ruidos que el de Sakura había hecho
tan solo hacía unos instantes.
"Pues en ese caso creo que ya somos dos"- dijo la gatita con una sonrisa
juguetona- "así que sígueme que conozco el lugar en el que
podemos conseguirnos algo para comer, no he vivido esto una y otra vez por nada,
no crees?"- y dicho esto inicio su marcha en busca de alimento con Sakura
justo detrás de ella.
**************
Luego de comer una suculenta cena, ambas se pusieron de nuevo en camino con
renovadas fuerzas, pero el silencio y lo tétrico del lugar comenzaban
a asustar a Sakura, quien ya estaba comenzando a temer que en cualquier momento
un fantasma podría salirles al paso; por lo que cuando su pequeña
acompañante se acercó a preguntarle cual era el motivo por el
que se veía tan pálida, Sakura dio un brinco tan grande que casi
llega al techo de lo tensa que se encontraba.
"Lo siento Sakura, no sabía que este lugar te iba a poner así"-
dijo Adry con preocupación, con lo que luego y casi hablando para si
misma dijo- "Tal vez no debí de haberte traído aquí"
Sakura observó a Adry y negó como pudo el que hubiese sido una
mala idea.
"Estamos juntas en esto hasta el final"- aseveró la niña,
con lo cual ambas siguieron su camino, pero Sakura aún estaba asustada,
por lo que comenzó a buscar temas de conversación con Adry para
distraerse.
"Oye Adry..."
"¿Si?"
"¿Qué harás una vez que salgamos del libro?, me refiero
a lo primero que te gustaría hacer"
Adry se sonrojó ante la pregunta, y respondió con algo de pena.
"Me gustaría volver a verlo"
Sobre la cabeza de Sakura aparecieron mil y un signos de interrogación.
"¿A verlo?, ¿A quien?"
"Tu sabes, a ... él, a mi príncipe?"
*Príncipe, príncipe, príncipe, príncipe..... ¡Por
supuesto...YUE!*
"A si!, ahora recuerdo... no sabía a quien te referías, es
la primera vez que te escucho decirle príncipe".
La naricita de Adry se tornó aún más roja de lo que ya
estaba, la pequeña gatita ya sentía hasta su colita arder
"Si, bueno; verás, eso fue lo primero que pensé cuando lo
vi aquella vez, que se veía como alguien especial; como un príncipe...
mi príncipe especial. Tal vez suene tonto, pero eso es lo que yo pensé".-
terminó de decir la felina, cuando ya su naricita parecía estar
a punto de incendiarse de lo roja que se veía.
Sakura lo pensó un rato, la verdad era que no estaba tan errada, cualquiera
que viera a Yue por primera vez estaría en todo su derecho de pensar
algo como eso, Yue de verdad se veía como el príncipe de algún
lugar mágico sin lugar a dudas. Sakura sonrió para si misma entonces,
quería decirle que pensaba lo mismo, decirle que una vez que salieran
ella volvería a verlo; pero entonces otro pensamiento vino a su mente,
¿Y que tal si no lograban salir del libro al fin de cuentas?. Este pensamiento
preocupó a Sakura, era la primera vez desde que inicio todo esto que
lo pensaba. Sakura miró a Adry, quien estaba entre sus brazos, y la estaba
mirando de manera interrogante, una gran gota surgió de la cabeza de
Sakura *^_^*v, y tras pensarlo un ratito más Sakura se decidió
por fin, nadie tenía ningún derecho de negarle alguna cosa más
a Adry, ya bastante le habían negado antes, más que suficiente
para cualquiera.
"Adry, yo tengo que decirte q..."
Pero justo en el momento en que Sakura estaba a punto de decirle algo a Adry,
un objeto pasó a una gran velocidad y a muy poca distancia de ella, y
fue a dar justo contra el muro a sus espaldas, destrozándolo en pequeños
pedazos.
"¡¡¡¡Cuidado Sakura!!!!, ¡Es uno de los dos
guerreros principales del hechicero que vive en este castillo!"
"¡¿Uno de los dos?!"- preguntó Sakura con incertidumbre-
"¡¿Qué dos?!".
Pero Adry no tuvo mucho tiempo de contestar, pues un enorme hombre con una larga
cabellera negra, y una gran armadura del mismo color, la cual resaltaba visiblemente
sobre la blanca piel visible en los brazos de aquel guerrero, volvía
a dar un fuerte golpe a otra de las paredes, justo en el lugar donde había
aterrizado la gatita, y de donde había logrado escabullirse hacia tan
solo un par de segundos antes.
"¡No te preocupes Sakura, tenemos la ventaja!. ¡Pueda que sea
un guerrero fuerte, pero no es muy inteligente, ya lo he vencido antes!"
"¡¿En serio?!"
"¡En serio!. ¡Ves esa gran columna de piedra, tiene base débil!"-
dijo al mismo tiempo que señalaba una gran columna gris y tétrica
en el extremo derecho del pasillo, justo por donde habían pasado un tiempo
antes- "¡Y además no sostiene nada, solo tenemos que hacer
que la golpee y asunto terminado, es fácil!"
Sakura miró a Adry, y luego a la columna; y luego tuvo que centrar su
atención en el enorme guerrero que casi la hace puré un par de
segundo después. Decidido, ella corría más rápido
que Adry, así que atrajo la atención del enorme guerrero, y tras
obtener lo que buscaba se dirigió hacia la columna señalada. Un
par de buenos movimientos de gimnasia y aquella gran columna cumplió
su cometido. Sakura, quien había caído a un costado del guerrero
y con la cara hacia el suelo se incorporó, y vio ante ella al enorme
guerrero caído, quien aún se movía, y tuvo compasión;
pero un momento después una luz envolvió al guerrero, y este desapareció
dentro de aquella luz.
"¿Q- qué pasó?"
"Lo vencimos, eso fue lo que pasó. Es un cuento, ¿recuerdas?,
si un personaje muere se prepara para volver a vivir el cuento si es necesario
hacerlo"
Sakura volvió a mirar el lugar donde el enorme guerrero había
desaparecido, y recordó entonces la noche tormentosa en la que Adry le
había contado lo que había sufrido cada que moría y tenía
que comenzar de nuevo toda la historia, y se preguntó si también
los otros personajes del cuento tenían que vivir lo mismo, y sintió
una gran pena en su interior por esto.
Sakura se levantó lentamente tratando de no pensar en ese tipo de cosas,
y debido a que se sentía un poco mareada se apoyó contra una de
las paredes.
"¿Te sientes mal Sakura?"- pregunto la vocecita chillona de
Adry con preocupación.
Sakura negó con la cabeza al tiempo que ofrecía una de las mejores
sonrisas que pudo dar en ese momento a su peluda amiguita, cuando de pronto
sintió que la pared que estaba detrás de ella comenzaba a alejarse,
y al volver la vista al frente vio al expresión asustada de Adry mientras
la miraba, y peor aún; al voltear rápidamente para ver que era
lo que pasaba, pudo notar que no era la pared la que se alejaba de ella, sino
que era ella la que se estaba yendo para atrás, literalmente hablando,
pues se estaba hundiendo. Trató de sujetarse de algo, pero no encontró
nada al alcance de sus manos, y de pronto sintió un gran sueño
apoderándose de ella, y dejó de luchar, y todo se volvió
oscuro. Había perdido el conocimiento.
***********
Sakura abrió los ojos, y de pronto se dio cuenta que ya no estaba en
el tétrico pasillo de hacia un rato, sino que se encontraba en una lujosa
habitación adornada de una manera exquisita. Comenzó a caminar
de manera lenta y cautelosa, al tiempo que inspeccionaba todo, cuando vio una
puerta justo a pocos pasos de donde ella se encontraba, y decidió salir
lo más rápidamente posible para encontrar a Adry, de seguro que
ella estaría preocupada, así que corrió hacia aquella puerta,
pero justo cuando se encontró a punto de salir de aquel lugar escuchó
pasos, y un par de voces bastante cercanas, y buscó donde esconderse,
pero era demasiado tarde. Sakura entonces pensó que sin importar qué,
no se dejaría vencer; por Adry, no se dejaría vencer, y tomando
una de lasa posiciones de defensa que le había enseñado Shaoran,
Sakura espero que viniera lo que debía de venir. Pero cuando vio lo que
vino a su encuentro se quedó de una sola pieza en su lugar.
*¡CLOW!*
Sakura no podía dar crédito a sus ojos, lo que estaba viendo era
imposible, ¿qué hacía el mago Clow en aquel lugar?, ¿Y
quien era la mujer que lo acompañaba?, ¿Y por que el mago Clow
se veía tan joven?
Tan absorta estaba Sakura que ni siquiera se movió de donde estaba, y
no se dio cuenta de para donde se dirigía la pareja hasta que estuvieron
justo enfrente de ella, al tiempo que actuaban como si no la vieran. Una vez
que estuvieron frente a Sakura, la niña por fin se dio cuenta de que
estaban a punto de estrellarse contra ella, y en lugar de salirse del camino,
todo lo que atinó a hacer Sakura fue tratar de llamar la atención
de Clow sin resultados; y de pronto Sakura y la pareja estaban demasiado cercanos
la una de los otros, y un momento después la pareja camino a través
de Sakura como si de aire se tratara, y luego siguieron su camino. Por fin Sakura
entendió, que para ellos ella no estaba en aquel lugar, pero entonces
que era ¿algún recuerdo del pasado?, no sería la primera
vez que algo similar le sucediese, pero en ese momento no estaba soñando,
como regularmente lo hacia al tener imágenes del pasado. Sakura se dio
cuenta entonces que se estaba perdiendo en sus propios pensamientos, cuando
por lo general un suceso como aquel tenía un significado, si eso estaba
sucediendo es que debía de enterarse de alguna cosa importante. Sakura
dio media vuelta y busco algún lugar donde poder observar todo con calma,
por lo que escogió un pequeño banquillo para sentarse, justo delante
del elegante sofá para dos personas donde la pareja se había ubicado.
"Vamos Lead!, solo un sorbito más. Mira que preparé este
macerado de licor exclusivamente para ti, es la receta secreta de mi familia,
todo un honor."
"Vaya Mei Fan, tú si que puedes ser convincente cuando quieres"-
dijo Clow con la voz algo extraña, y visiblemente mareado -" Está
bien, pero solo una más, después de todo no está entre
mis hábitos el despreciar el regalo de una bella dama"
"Tú si que eres todo una caballero Lead querido"- dijo la hermosa
y elegante dama, al tiempo que le ofrecía una última copa de aquel
extraño brebaje celeste luminoso que le había ofrecido al mago
Clow ya en dos ocasiones anteriores en lo que iba de la noche.- "Y entonces,
por qué no me cuentas algo de ti, que tal de tu magia; después
de todo ambos somos hechiceros, así que es un tema en común del
cual podemos conversar, ¿no te parece?"- terminó de decir
con voz melosa la dama hechicera al tiempo que volvía a llenar de manera
sutil la copa del mago Clow.
"Yo.. yo no sé de que quisieras hablar, sabes que miiiiii... experiencia
en m- magia abarca... cielos, es la primera vez que me siento así por
beber, nunca creí que un licor me afec..."
"Vamos, no me cortes el tema; estoy segura que un hombre de mundo como
tu no podría ser afectado por un par de copitas... ¿O es que no
me quieres contar sobre ti?"- dijo con voz melosa la hechicera, al tiempo
que se juntaba mucho más al lado del mago Clow y le volvía a llenar
la copa - "Además, mira; ni siquiera te has terminado la tercera
copita que te ofrecí, ¿Cómo puedes ser tan cruel conmigo?"
Clow miró la copa que tenía en la mano, juraría que se
la había tomado, pero en realidad ya no estaba muy seguro, así
que le dio un sorbo y trató de concentrarse en la conversación
que sostenía con su anfitriona.
"L- lo sieeeento Mei Fan; creo que estoy un poco desatento esta noche,
pero ¿qué fue lo que me preguntaste?"
"Te dije que me cuentes un poco sobre la magia que tu practicas, por ejemplo
¿Por qué no me cuentas algo sobre tus guardianes, cual fue el
hechizo que usaste?"- siguió preguntando la hechicera con aquella
seductora y melosa voz, al tiempo que pensaba - *Perfecto, si logró sacarle
esta información entonces comprobaré que realmente mi brebaje
funcionó, y entonces tendré segura una comprometedora noche y
un muy triunfal amanecer. ¡¡¡Ningún hombre es capaz
de resistírsele a la excepcional Lou Mei Fan!!! ... JAJAJAJAJA*.- tras
lo cual volvió a llenarle la copa un poco más a su invitado
"El hechiiiizooo, el hechizooooo..... Ah!, si, ya recordé... más
o menos fue algo como esto.... "- y así el mago Clow procedió
a contarle de una manera bastante detallada y paso por paso todo el proceso
a la hermosa hechicera que tenía a su costado, al tiempo que seguía
sorbiendo de aquella copa sin fin la 'última' copa que le habían
servido- "... y ese es básicamente el proceso de la creación
de un guardián".
"Vaya Lead, tú si que eres todo un hechicero, vamos; por qué
no me das esa copa para ponerla sobre la mesa"- dijo la hechicera la tiempo
que le quitaba la copa de la mano a Clow, tras lo cual literalmente se le tiró
encima al pobre y bastante mareado mago, y procedió a quitarle todo el
aliento de un gran beso.
Sakura estaba roja de la vergüenza ante lo que estaba observando; y emitió
un ligero chillido por la sorpresa de ver a la hechicera lanzarse encima de
Clow, y luego se tapó los ojos. Por su lado Clow, en pleno beso escuchó
un sonido algo raro, y durante unos segundos pudo ver a una pequeña niña
de unos 12 años justo en frente de ellos, presenciando toda la escena;
por lo que de un rápido y suave movimiento se quitó a la hechicera
de encima y trató de recuperar el aliento.
"¡Por Dios Mei Fan!, no delante de la niña"
Al escuchar estas palabras, tanto Sakura como Mei Fan se sorprendieron, pero
no por las mismas razones.
"¡Niña!, ¡Cual niña!, ¡A QUE RAYOS ESTAS
JUGANDO AHORA LEAD!, ¡Aquí no hay ninguna niña!"
El mago Clow volvió a mirar el lugar en el cual había visto a
aquella pequeña, y efectivamente no vio a nadie allí.
"Pero... yo.... Hmmmmmm, creo que no me estoy sintiendo muy bien Mei Fan,
tal vez lo mejor sea que me retire"
"¿¡Que!?, No, espera no hace falta; si quieres te puedes quedar
a dormir en una de las habitaciones de mi mansión, después de
todo tengo muchas"
"No, no quiero causar molestias"- dijo de manera insegura el pobre
mago, al tiempo que se acercaba al balcón y respiraba hondo tratando
de despejarse un poco, pero ni así lo logró, entonces de una de
sus manos salió una pequeña lucesita que subió hasta el
cielo, y poco tiempo después los dos impresionantes guardianes creados
por le mago Clow aparecieron en el mismo balcón donde se encontraba Clow.
"Nos llamaste Clow"- dijo Yue de manera majestuosa al llegar, pero
de pronto su actitud seria se tornó a una de preocupación al ver
el estado en el que se encontraba su amo.- "¡CLOW!"
"Estoy bien Yue, no tienes por que preocuparte. Creo que solo me afectó
un poco el licor que bebí, y eso que tome poco, creo que estoy un poco
sensible esta noche"- terminó por decir Clow con una sonrisa, mientras
que trataba de serenar a su querido guardián, a la vez que se apoyaba
sobre él para luego terminar de montar de manera poco elegante, debido
a lo mareado que estaba, sobre de Kerberos.
"Mei Fan, agradezco mucho tu hospitalidad, fue una hermosa velada, pero
espero que comprendas si te dejo ahora; de verdad que no me siento bien."-
y dichas estas palabras, el mago se alejó junto con sus guardianes, y
los tres desaparecieron en la negrura de la noche, dejando así a la hechicera
con la palabra en la boca, y un gran rencor naciendo dentro de ella debido a
lo que según sus propios pensamientos, había sido el desplante
más grande que había recibido en toda su vida... y encima con
el estúpido pretexto de 'No delante de los niños', cuando no había
ninguna niña allí...
"Maldito Clow, juro que me vengaré por esto... ¡¡¡NADIE
DEJA PLANTADA A LOU MEI FAN!!!"
Mientras tanto Sakura estaba en el mismo banquillo tratando de entender que
era lo que había sucedido; y pensando, al la vez, que si Clow la había
visto, existía la probabilidad de que esa extraña mujer también,
así que lo mejor era irse de esa habitación de inmediato; y así
lo hizo Sakura, solo que al cruzar la puerta de la habitación se encontró
con que estaba en otra habitación de adornos completamente diferentes,
bastante masculinos podría decirse; y escuchó unas voces venir
desde atrás suyo, por lo que volteó y se encontró mirando
a un balcón donde de pronto aterrizó el imponente Kerberos junto
a Clow, y un par de segundos después Yue.
"Te dijimos que no fueras donde esa mujer histérica, pero tu nooooo....
el gran Clow nunca puede decirle que no a una falda, cierto?."- gruñó
Kerberos ni bien había aterrizado, con lo que parecía estar continuando
con una discusión que había llevado durante todo el camino.
"Ya te dije que lo siento; tampoco es como para que me regañes como
si fuera un niño chiquito"- dijo a su vez Clow con suavidad y una
gran sonrisa, la cual se borró de pronto debido a un mareo que sintió.
"Ah, si?; pues lo pareces, mira nada más el estado en el que te
encuentras. Para mi que esa bruja sobreadornada planeó todo esto con
algún macabro propósito. ¡Yo te dije que no fueras!. A ver,
que fue lo que te sacó la loca esa, ¡Dinos!"
"De acuerdo Kerberos, puede que tengas razón, la verdad es que yo
también he pensado en eso"- dijo con dificultad Clow al tiempo que
Yue lo ayudaba a acomodarse en el sillón que se había comprado
hacia poco, y del cual se había prácticamente 'enamorado' a primera
vista- "Si he de ser sincero, creo que me sacó información
sobre la creación de... de ustedes"- terminó de decir el
mago, cada vez más mareado.
"¡¡¡QUE QUEEEEEEEEE!!!!!!!- gritó Kerberos, al
tiempo que Yue también mostraba ahora una notable angustia.
"Pero no tienen de que preocuparse"- dijo nuevamente el mago con una
voz calmada y tratando de no dar signos de lo mal que se sentía- "La
verdad es que creo que le terminé jugando una pequeña broma a
Mei Fan; pues con el hechizo que le di, ella no podría crear ninguna
bestia o guardián, le hice algunos cambios para que solo funcione si
su ama, en otras palabras ella, logra poner su corazón en ese acto, y
como ella no quiere a nadie más que a si misma, el hechizo no le saldrá,
no logrará sacar ni siquiera un gatito chiquito............ bueno.....
eso creo, la verdad es que estoy tan mareado que ni me acuerdo, peeerooo....
ay, que dolor de cabeza; .........aún cuando le saliera el hechizo, su
magia se debilitará tanto que necesitará de varios anos para volver
a inteee- inteeentarlo.... y tal vez, ni siquiera todo lo que le queda de ....
vida.... sea suficien.... "
En ese momento el mago Lead Clow cayó pesadamente al piso, ya que había
perdido el conocimiento; tras lo cual sus dos preocupados guardianes fueron
a auxiliarlo; al igual que la pequeña Sakura, quien a pesar de saber
que de todas maneras nada podía hacer, quería ayudar; pero entonces
la escena frente a ella comenzó a hacerse cada vez más lejana,
y siguió así hasta que todo a su alrededor se tornó negro.
*************
"¡Sakura!, ¡¡¡SAKURA!!!"
Sakura sintió de pronto que alguien la llamaba desde un lejano lugar,
que inexplicablemente cada vez estaba más cercano; y entonces sintió
claramente una pequeña cosita caliente y peluda sobre su mejilla; y al
abrir los ojos vio una de las patitas de Adry, y muy, pero muuuyyy cerca el
rostro de la misma mirándola de manera preocupada.
"¿Estas bien Sakura?, me preocupaste mucho. De pronto te caíste
al suelo y estabas desmayada, creí que no volverías a despertar,
¡¡Me asustaste!!"- dijo en señal de protesta Adry, con
pequeñas lagrimitas asomando por sus ojitos.
Sakura acarició la pequeña cabecita de Adry y susurro un 'lo siento'
muy bajito; al tiempo que se preguntaba si lo que había visto había
sido real o solo lo había soñado. Pero no tuvo mucho tiempo para
pensar en eso, pues a sus espaldas escuchó un ruido; y de pronto el rostro
espantado de Adry le dijo que algo no iba bien; y al voltear su vista hacia
atrás descubrió con terror a una enorme bestia de aspecto oscuro
y espantoso, y que echaba espuma por la boca, mirándola como si tuviera
la palabra 'CENA' escrita encima de ella.
Sin pensarlo dos veces, Sakura se levantó de inmediato y echó
a correr lo más rápido que sus piernas le permitían hacerlo,
mientras se aseguraba de llevar a la pequeña Adry bien sujeta contra
su pecho.
Sakura siguió corriendo, mientras suplicaba a sus fuerzas que por favor
no la abandonaran, al tiempo que iba a toda velocidad por los pasillos de aquel
palacio sin un rumbo muy fijo que digamos; y así siguió por un
sin fin de pasillos y escaleras, al tiempo que podía sentir a la enorme
bestia casi pisándole los talones. Luego de haber corrido durante un
buen trecho, Sakura pudo divisar algo así como un lugar para esconderse,
lo cual era en realidad una mesa con un mantel bastante largo; pero para Sakura
era la salvación delante de ella, así que sin disminuir en lo
absoluto la velocidad, y casi en un acto desesperado, se tiró al suelo
y rodó hasta debajo de la mesa, donde procuraron tanto ella como la gatita
quedarse en un completo silencio. Prácticamente pudieron sentir los paso
de la bestia a su costado, justo en el momento en el que paso al lado de la
mesa y bien sus horribles patas ir de manera lenta y a la vez atenta; y ninguna
de las dos se atrevió a moverse una vez que sintieron a la bestia abandonar
el pasillo un buen rato después, hasta que de puro miedo, la pequeña
Adry comenzó a temblar de manera casi convulsiva, por lo que Sakura en
extremo preocupada trató de distraer a la pequeña minina con una
ligera conversación a base de murmullos.
"Adry, ¿era esa la segunda criatura del mago de este castillo de
la que me hablaste?"
La gatita asintió al tiempo que volvía a la realidad, por lo que
Sakura pensó que debía de hacerle alguna otra pregunta para mantenerla
tranquila, lo malo era que no podía pensar en nada en ese momento; hasta
que se le ocurrió otra pregunta.
"Oye Adry; solo por curiosidad, cual es el elemento celestial al que representas,
¿el sol o la luna?"
"Ninguno; yo represento a las estrellas, o por lo menos eso fue lo que
me dijo mi antigua ama, pero tu ¿cómo lo supis....?"
En ese preciso momento la cabeza de la bestia surgió de debajo del mantel,
por lo que las dos refugiadas pegaron un enorme grito, tras lo que Sakura volvió
a echar a correr con Adry bien apretada contra su pecho, al tiempo que el pensamiento
de 'Me van a almorzar' corría por su mente; y así, sin darse cuenta;
Sakura y Adry llegaron a lo que se veía como un gran salón central,
y fue en ese lugar en el que la bestia oscura las acorraló de manera
definitiva, y estaba a punto de echarse encima de las dos amigas cuando una
voz, que al oído de Sakura sonó como malévola, detuvo en
seco a la bestia.
"¿Quiénes han osado entrar a mi morada y sin mi autorización?"-
preguntó la misma voz, al tiempo que el dueño de la misma salía
de entre las sombras.
Sakura entonces pudo ver a un hombre como de veintitantos, de cabellera larga
y gris, ojos como desquiciados, y unos ropajes que si se le cambiaban de color,
y se variaba la posición de algunos diseños; Sakura comprendió
que se trataba de una representación del mago Clow; y si lo pensaba mejor,
dos criaturas, una de forma humana y otra de bestia no eran más que Yue
y Kerberos. Esa mujer si que había llegado a odiar al mago Clow. Sakura
apretó los labios al tiempo que abrazaba con más fuerza a Adry.
"¿Y bien?, ¿Es que acaso no piensan contestar a mis preguntas
par de intrusas?"
"Mi- mi nombre es Sakura"- dijo la niña con un perceptible
temblor en la voz.
"¿Sakura, Sakura, Sakura, Sakura..... ? hmmmm, no!, no me dice nada
tu nombre, así que creo que no me interesas, por lo que dejaré
que mi mascota se divierta un poco más con ustedes"- y tras decir
esto, los ojos del malvado mago brillaron de manera tenebrosa, y una extraña
aura envolvió a la negra bestia que en ese momento se encontraba al costado
de su amo, la cual comenzó a crecer de manera desmesurada, y adoptó
una postura más antropomorfa (osea que se puso en dos patas, y las garras
delanteras adoptaron la forma de manos).
"Y ahora, que comience la diversión"- dijo el mago a la vez
que se sentaba en un enorme sillón salido de la nada, y la enorme bestia,
ahora convertida en mucho más enorme, y espantoso monstruo, comenzó
a perseguirlas por toda la habitación; la cual para terror de Sakura
había perdido todas las puertas por las que hubiese podido salir.
Luego de un rato de persecución, el hechicero comenzó a mostrar
signos de estarse aburriendo, por lo que cansado del asunto anunció que
era hora de que el juego se acabase; y apuntó con una mano a Sakura,
la cual comenzó a iluminarse, y un rato después Sakura no solo
estaba evitando al monstruo, sino a los mortales rayos lanzados por el hechicero.
De pronto Sakura se quedó arrinconada y no tuvo a donde escapar, y justo
en ese momento tanto e monstruo como el hechicero estaban listos para dar el
golpe final; Sakura tomó entonces a Adry y la besó en la cabecita,
y al ver el rayo que estaba a punto de salir de la mano del hechicero la lanzó
para un costado lejos de ella y del terrible monstruo.
"¡¡¡SAKURA!!!!"
"¡SÁLVATE ADRY!"
"¡¡¡¡NNNNOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!!"
Sakura cerró los ojos y espero el ataque, pero entonces un gran rugido
se dejó escuchar; y al abrir los ojos Sakura, vio un montón de
polvo a su alrededor, y vio que de delante de ella salía un rayo directo
hacia el hechicero; quien segundos después era una enorme estatua brillante,
de lo que parecía ser diamante.
Luego de que el humo se disipara por completo, Sakura no pudo dar crédito
a lo que sus ojos veían. Frente a ella se encontraba aquella que la niña,
suponía, era su pequeña Adry, o más bien dicho Adrastea,
pero no estaba muy segura. Justo entre aquel horrible monstruo y ella se encontraba
la hermosa figura de un felino grande; un tigre, si es que se podía deducir
la especie de la hermosa bestia; y si era en verdad la pequeña gatita,
hubiese sido imposible adivinarlo a simple vista. El tigre, o mas bien dicho
tigresa, era casi de la misma talla de Kerberos en su forma verdadera, aunque
un poco más estilizada. No tenía el pelaje blanco, como lo tenía
Adry, sino que era visiblemente plateado, y reflejaba en destellos todo a su
alrededor; y estaba adornada por hermosas rayas doradas en el lomo y las patas.
De su lomo salían dos enormes alas plateadas de dragón, las cuales
eran casi traslúcidas, y al mirarlas con cuidado se podían observar
pequeños destellos, tales como las de las estrellas, a las que la bestia
que tenía delante representaba; y estaban adornadas por una punta, al
parecer de diamante, justo en el extremo superior de cada una de ellas. Su cola
era larga, y casi a la mitad se dividía en dos partes; y al igual que
el lomo y las patas, también presentaba aquellas hermosas rayas de oro;
así como unos adornos dorados con piedras rojas como adorno al final
de cada una de las dos terminaciones. De su pecho podían verse las terminaciones
en punta de lo que parecía ser un peto dorado, y que bordeaba el pecho,
el lomo, y parte de la región ventral de la bestia por media de unos
tirantes trenzados de oro y plata, que a la vista se veían bastante flexibles;
y si Sakura hubiese podido observar también la parte anterior de Adrastea,
hubiese visto que en el centro del peto, justo en medio del pecho, una gran
gema roja se dejaba ver. También podían observarse un brazalete
compuesto de diamantes en la pata posterior derecha; y una serie de aros plateados
y unidos por un hilo de oro en la oreja izquierda.
Sakura estaba anonadada; lo que veía frente a si misma era algo imposible;
pero dada la naturaleza de la situación en la que se encontraba, cualquier
suceso imposible era a su vez completamente posible en aquella realidad.
"¿A-Adry?"- musitó Sakura, casi con miedo.
Ante su llamado, la hermosa bestia plateada volteó la cabeza mostrando
entonces aquellos grandes y luminosos ojos rojos; que eran lo único que
podía reconocerse como característico de la pequeña minina;
y además Sakura pudo observar que en la frente de la misma se encontraba
una gran joya amarilla en forma de estrella, en cuyo centro brillaba un pequeño
y la vez bastante llamativo corazoncito color rojo, que daba la impresión
de estar vivo. Así como también una dulce sonrisa en los felinos
labios.
"No te preocupes Sakura; no solo eres mi ama, sino también mi amiga,
yo te protegeré."- y dicho esto, la enorme gata se lanzó
en pos del monstruo que logró aquel malvado hechicero.
"Pero...¿cómo?...."
*Todo lo que se necesitaba era un poco de amor*- resonó una voz masculina
en la mente de Sakura. *Esa era la clave del hechizo... a diferencia de su creadora,
tu le ofreciste tu corazón*.
Sakura miró a su alrededor sin poder localizar a nadie... 'esa voz'...
¿de quien era?, *Del mago Clow....*... no, ella conocía demasiado
bien la voz del mago Clow, y por primera vez, no era él quien hablaba
en su mente.
*¡CUIDADO!*- gritó la misma voz en su mente, a la vez que, gracias
a la oportuna intervención de aquella voz, Sakura logró esquivar
un enorme pedazo de pared que casi cae encima suyo.
Sakura volvió su atención a la batalla; Adrastea estaba atacando
con todo su ser a aquel monstruo gracias a aquellos poderosos rayos que salían
de sus fauces; por lo que gran parte de la habitación había sido
ya cambiada de piedra a diamante; y la diferencia de pesos hacía que
la pared se rajara por los lados que aún eran de piedra, haciendo a la
vez que estos pedazos se desprendieran de manera estrepitosa, por lo que por
efecto de los choques, arrastraban otros pedazos en su caída... en resumidas
cuentas, la habitación se estaba derrumbando.
Sakura corrió alrededor en busca de refugio.... si tan solo hubiese tenido
a Shield con ella; pero no la tenía, y debía buscar rápido
con que protegerse o de lo contrario terminaría bajo de alguna de aquellas
enormes piedras. Tras unos segundos vislumbró un hueco y corrió
para esconderse en él; pero justo cuando estaba por meterse otra de aquellas
enormes piedras cayó justo delante de ella, por lo que un gran grito
de su parte fue lo siguiente que se escuchó en la habitación.
El enorme monstruo fijó entonces su atención en Sakura, y con
un rápido ataque logró quitarse a Adrastea de encima para ir en
busca de la pequeña.
Adrastea, quien había terminado empotrada contra una pared, se despabiló
de manera rápida y dirigió su vista hacia su ama, y el monstruo
que iba detrás de ella.... "¡¡¡NOOOO!!!"...
fue todo lo que atinó a gritar antes de salir disparada contra aquel
horrible ser; con lo cual, luego de alejarlo de Sakura por medio de un cabezazo
con el cual le hizo perder el equilibrio y lo dejó tendido en el suelo;
logró por fin darle el golpe final gracias a la emisión de uno
de sus poderosos rayos, el cual le dio de lleno al monstruo, haciendo que este
se convirtiera en una gran estatua de diamante.
Sakura salió del escondite improvisado en el cual se había refugiado,
y observó a Adrastea mirando fijamente la estatua que hasta hacia poco
había sido un ser viviente. La niña se acercó a la bestia,
y al llegar a su lado notó que las lagrimas corrían por la mejillas
de la tigresa.
"¿Adry?"
"Por fin lo logré... por fin terminé con esta pesadilla...
lo logré..."- musito Adrastea, tras lo cual miró entonces
directo a los ojos de Sakura de manera algo nublada debido a las lagrimas- "Lo
logré.... lo logré.... ¡Sakura!"
La cabeza Adrastea fue directo al pecho de Sakura, donde la gata se arrimó
para llorar de felicidad... por fin era libre. Por su parte Sakura la abrazó
con emoción. Pero en ese momento se escuchó un ruido proveniente
del suelo que estaba justo debajo de las dos, y luego apareció una enorme
grieta que terminó abriéndose en dos, tras lo cual Sakura cayó
de manera inexorable en el abismo que se encontraba debajo de ella.
"¡SAKURA!"- gritó con desesperación Adrastea,
al tiempo que se lanzaba en picada tras de la niña; por lo cual tras
unos instantes por fin logró acercarse lo suficiente como para que Sakura
se abrazara a su vientre. Tras esto la enorme felina trató de utilizar
sus alas para volar fuera de aquella trampa de rocas que caían alrededor;
pero entonces una de las rocas más grandes la golpeó con fuerza
en el lomo; tras lo cual la enorme tigresa regresó a ser la pequeña
minina, justo en medio de los brazos de Sakura. Tras esto Sakura abrazó
con fuerza a su Adry, al tiempo que esta comenzó a susurrar algo contra
el pecho de Sakura.
"¿Qué dijiste Adry?"- le urgió la niña;
cuanto más permanecieran despiertas, más posibilidades tenían
de salir de allí.
"Dije que... es una lastima que ya no vuelva... a ver... a mi príncipe...
tenía la esperanza de volver a ver.... su hermoso pelaje dorado, bajo
la luz... de la luna".
Tras estas palabras, Adry terminó por perder el conocimiento, al tiempo
que Sakura con lagrimas en los ojos, abrazó aún más fuerte
a la gatita, al tiempo que pensaba que había sido una tonta al equivocarse
de guardián de esa manera.... * Kero*.
Luego de este pensamiento, Sakura terminó de por perder el conocimiento,
tras lo cual siguió cayendo de manera inexorable por aquel abismo que
al parecer no tenía fin.
Mientras tanto, en algún lugar, una misteriosa mano enguantada se movió
justo delante de un espejo, haciendo que la imagen de Sakura y Adry abrazadas,
inconscientes, y cayendo por aquel abismo, se borrara por completo; una sonrisa
surcó por los labios de aquel extraño personaje en medio de la
oscuridad que reinaba en la habitación en la cual se encontraban.
"Y entonces, ¿lograste lo que querías?"- una voz femenina
se dejó oír en el silencio del lugar.
Aquella misteriosa sonrisa se borró de los labios del misterioso personaje,
a la vez que de sus labios brotaba la misma voz que Sakura había escuchado
en el interior de su mente.
"No, aún falta mucho camino por recorrer, pero se que mi decisión
ha sido la correcta; ella es exactamente a quien necesito, ella será
la que me ayude a cumplir la misión."
"¿Qué no era Lead Clow tu primera elección?; no entiendo
por que entonces la escogiste a ella si la reencarnación de Clow es aún
mucho más poderosa que la actual maestra de cartas"
"Quizás, con el tiempo, llegues a comprender lo equivocada que estas,
pues no pienso perder mi tiempo tratando de explicarte mis razones Bella"-
y tras decir estar palabras, el misterioso ser dio por terminada la conversación.
"UY!, a veces eres insoportable"
La misteriosa Bella se retiró de la habitación, dejando a su compañero
a solas, tras lo cual este esbozó nuevamente aquella sonrisa.
"Si, ni decisión es la correcta; ella era a quien tanto había
esperado"
Fin del cuarto capítulo
Notas de la
autora:
Bien, espero que a todos le haya agradado este capítulo; como pueden
ver algunos misterios y preguntas se resolvieron, pero otros tantos a su vez
surgieron: ¿Quién es el misterioso dueño de la voz que
le habló a Sakura?, ¿De que misión habló?, ¿por
qué si ayudó a Sakura en el derrumbe del castillo, no así
la ayudó mientras caía por el abismo?... bueno, no se si alguien
se preguntó esto último, pero como sea allí tienen algunas
preguntas.
En fin, el príncipe de Adry resultó ser Kero; ¿qué
pasará también respecto a esto?, pues por lo menos esto último
se verá en el siguiente y último capítulo de este fic...,
y ya no doy más adelantos por que de lo contrario ya no tendrían
razón para leerlo.uier comentario o crítica pueden escribir a
[email protected], estaré esperando sus cartas con muchos ánimos...
Hasta la próxima y un gran bechito felino para todos
chibineko =^.~=