- Te aseguro que ya estoy bien Paris

- Pero si apenas te acaba de bajar la fiebre

- Yo me siento muy bien

- Anaís, entiéndeme, creo que deberías quedarte más tiempo en cama

- Entiéndeme tú a mí, el salir y respirar aire fresco hará que me mejore

- Pero… - no pudo decir más por la mirada que le lanzó Anaís – está bien, pero sólo con una condición, que me dejes acompañarte

Anaís lo pensó unos momentos y asintió, después del beso del lago y el que le dio hace uno minutos logro que desapareciera la confusión que tenía respecto a su relación con él [ahh, el amor vence cualquier barrera]

- OK. Pero ahora sal, necesito cambiarme – dijo mientras le señalaba la puerta

- Te estaré esperando en la puerta – y se fue

Anaís se dirigió al ropero y sacó una ropa cefiriana de color verde [lógico, je]

Mientras tanto, al salón del trono llegaron Tata, Lucy, Latis e Isolda

- Hola, ¿cómo sigue Anaís?

- No sabemos, Paris no ha venido a decirnos nada

- ¿Quién eres? – Preguntó Marina al notar a Isolda llegar, que por suerte no había alcanzado a oír la contestación de Tatra

- Soy Isolda, ¿y tú?

- Marina Ryuzaki

- ¿La guerrera del agua?

- Sí

- ¡QUÉ FELICIDAD! – dijo mientras la abrazaba

- ^~^U ¿Podrías soltarme?

- Eh, oh lo siento

- Isolda, recuerda que no puedes andar abrazando a todo el mundo

- Ya lo sé Guru Clef. Pero sabes cuánto admiro a las guerreras mágicas

- ¿Por qué? – Se escuchó una voz en el pasillo

- ¿Cómo que por qué? – Contestó Isolda sin voltear – son las salvadoras de Céfiro y gracias a ellas vivimos en armonía con los demás planetas

- Eso fue porque ustedes lo quisieron así, nosotras sólo les ayudamos un poco – terminó de decir Anaís al entrar al salón – por cierto, mi nombre es Anaís Hououji

- La guerrera del viento – pero no la abrazo, pues el ver que Paris la tenía tomada de la mano y recordando las palabras de Lucy, no era alguien que le agradara

- ¿Quién eres?

- Isolda

- Tiempo sin verte – comentó Paris

- Desde que comenzó su entrenamiento hace exactamente un año

- Vaya, tanto duro – contestó Paris – no me di cuenta

- Ay Paris, no tienes remedio

- Pero así me quieres ¿no?

Anaís se sonrojó, Latis se petrificó, Guru Clef sólo observó la escena con aparente indiferencia *se nota que nunca se dio cuenta de los sentimientos de Isolda* ésta tenía una mirada de pocos amigos y los demás sólo se rieron

- ¿Cómo te sientes Anaís? – preguntaron Marina y Lucy al unísono

- Mucho mejor chicas, perdón por haberlos preocupado – comentó mientras hacia una reverencia

- ¡Qué bueno! – Dijo Caldina mientras la abrazaba – no vuelvas a hacerlo, creí que morirías

- Tranquila Caldina, nadie se muere por un poco de calentura

Al voltear Caldina hacia donde estaban todos notó que la situación estaba un "poco" tensa y que ni las chicas, ni la princesa, y como siempre, ni Paris se habían dado cuenta

- ¿Qué les parece si vamos a dar una vuelta por los jardines? – Sugirió intentando desaparecer la tensión

- Buena idea – contestaron todos y se fueron a caminar

Así pasaron todo el día, con el único problema de que Anaís sí se dio cuenta de los sentimientos de Isolda hacia Paris, aunque éste ni cuenta [bastante despistado el niño, ¿no?]

Al día siguiente en el cuarto de Anaís

- Oye Anaís, ¿por qué estás tan seria?

- Eh, yo… no

- Y dinos, ¿cómo va tu relación con Paris?

- Pues yo veo que van muy bien, al igual que tú con Latis, ¿me equivoco?

- No… - contestaron las dos completamente coloradas

- Oye Marina, ¿y tú? ¿Cómo vas con Guru Clef?

- Pues… nada – dijo con una mirada triste – para él simplemente soy una niña

- Ay Marina

- No se preocupen, desde el principio supe que era un amor platónico e imposible – dijo aparentando tranquilidad

En el salón del trono

- No entiendo, ¿por qué estás tan molesta?

- ¿Yo? Yo no estoy molesta

- Entonces porque la cara de pocos amigos

- Oh ¡déjame en paz Paris! – gritó mientras se iba corriendo

- Y no esta molesta – dijo mientras regresaba al trono - ¿por qué no ha llegado Guru Clef? Siempre está antes que yo

- No quería molestarte mientras hablabas con Isolda

- ¿Escuchaste todo?

- Dime, ¿cómo te fue en el entrenamiento?

- Bien, ¿por qué nunca me respondes?

- Porque no tengo que hacerlo

- Hum

En eso llega Latis

- ¿Cómo durmieron?

- Bien – contestaron al unísono

- Que bien *acaba de llegar y ya están discutiendo*

- Paris, ¿qué vas a hacer ahora que regresaste?

- ¿A qué te refieres?

- Llevas seis años evadiendo las responsabilidades de ser el príncipe de Céfiro

*Ahí van de nuevo*

- Yo no tengo responsabilidades con Céfiro, la última representante fue Lucy y al anular el sistema dejo a cargo a todos los habitantes

- Pero ellos ocupan que alguien los guíe

- Puedes seguir tú, lo has hecho desde la muerte de mi hermana y lo haces muy bien

- Pero yo tengo otras responsabilidades que atender, recuerda que soy el Mago Supremo

- Eso ya lo sé, pero eso no quiere decir que sea yo el que tenga que hacerse cargo – y diciendo esto salió del salón

- Deberías buscar a alguien más Guru Clef, sabes que el nunca aceptará esa responsabilidad

- Pero sabes que es el mejor postor, todos lo conocen como el hermano de la princesa Esmeralda y confían en él

- Lo sé, pero eso no es suficiente, lo que él menos quiere es tomar el lugar que alguna vez fue de su hermana

- ¿Qué piensas hacer?

- No sé, pero algo tenemos que hacer

- ¿Alguien ha visto a las Tata y Tatra?

- Se fueron con los niños, Odi, Ráfaga y Paris a continuar el recorrido de ayer

- ¿Sólo ellos?

- Sólo ellos, ¿por qué la preguntas Anaís?

- Por nada Caldina

Caldina se fue y continuaron hablando sobre el futuro de Céfiro y las relaciones con los demás planetas hasta que llegó Isolda

- Oigan, ¿dónde está el príncipe?

- Salió con las princesas de Cizeta

- Ah – soltó un suspiro resignada

De pronto Anaís comenzó a toser, preocupando a Latis y a Guru Clef porque comenzó a emanar una energía negativa muy poderosa, mucho más que las anteriores

- Vaya, vaya, ¿por qué todos están reunidos? – Dijo Oa sarcásticamente – no me digan, a ver, ¡YA SÉ! Estaban planeando la manera de deshacerse de mí, ¿me equivoco?

- Completamente

- Ah, y yo que creí que estarían haciendo algo productivo

- Oa, ¿qué es lo que deseas realmente?

- Ya se los dije, quiero venganza, verlas sufrir por su crimen

- Pero no fue nuestra culpa, eso era lo que la princesa Esmeralda quería

- ¡MENTIRA! Lo único que quería Esmeralda era ser feliz con Zagato

- Oigan, ¿alguien podría decirme que está ocurriendo aquí?

- Eso es algo que no te interesa, niña – contestó Oa despectivamente – hechizo negro

Todo comenzó a oscurecerse, de pronto todos se perdieron de vista

-- Marina ¿no te sientes mal por haber matado a Esmeralda? Si lo único que hizo fue enamorarse de Zagato --

- Nosotras no queríamos hacerlo, pero esa era nuestra misión – contestó Marina, mientras recordaba los eventos – no queríamos hacerlo

-- Pero lo hicieron [voz de juez en un juicio] los mataron sin piedad ni misericordia --

- ¡¡¡No fue así, nosotras no lo sabíamos, nadie no los dijo!!! – Gritaba mientras se tapaba los oídos y cerraba los ojos, intentando borrar todas las imágenes de la batalla con Zagato y la princesa Esmeralda

-- si eso fuera verdad no estarías sufriendo ahora, no tendrías eso sentimientos de culpabilidad, ¿me equivoco? --

- ¡¡¡No fue nuestra culpa, no la fue!!! – Gritó Marina cayendo de rodillas y llorando - ¡¡¡nosotras no lo sabíamos, no lo sabíamos!!!

-- Si fuera así, no estarías llorando, y tu corazón no estaría sufriendo --

A Lucy le estaba pasando algo similar, sólo que ella había entrado en shock (estaba hablando con Luz)

- Tranquila Lucy, no le hagas caso, tu y yo sabemos que no querías matarla, que no lo sabían

- Pero aún así lo hicimos, los matamos, cuando su único pecado fue el de enamorarse

- No lo sabían, nadie se los dijo, además, o lo hacían o las mataban, recuerda eso también – la miró a los ojos – por favor, deja de llorar, recuerda que todo lo que te duela me duele también

- Entonces entiéndeme, recuerda que tu naciste de ese dolor

- Si, pero la ventaja es que ahora ya puedo ayudarte a superarlo

- ¡No creo que pueda superarlo nunca! – Gritó mientras se abrazaba a Luz llorando, está sólo le acarició la cabeza

En la realidad

- Hasta que por fin encuentro un buen contrincante, ya era hora, comenzaba a aburrirme

- Ahora verás – contestó Isolda al lanzarse con ella con espada en mano

*************************************************************************

- Amo Zagato, ¿por qué no ha enviado al espíritu a luchar contra las guerreras?

- ¿Espíritu? –Preguntó Zagato confundido - ¿de qué hablas?

- Del espíritu que está siempre a su lado, desde que estoy a su lado no he visto que se separe de usted

- No sé de que está hablando, yo no siento a nadie en está habitación a excepción de Esmeralda y a ti, por supuesto

*Como lo sospeché, no puede ver al espíritu*

- ¿Nova?

- Ahora se lo demuestro – y caminando hacia donde esta Anaís, la tomo del cuello y comenzó a apretarlo, con la otra mano le detuvo las suyas

De pronto, el cuerpo de Oa se volvió visible, ante un sorprendido Zagato

- ¿Quién eres?

- Soy Oa, el espíritu que un día usted llegó a salvar – contestó Oa, una vez que Nova la/o soltó y haciéndose visible

- ¿Y qué haces aquí?

- Como me salvaste la vida, mi nuevo deber es quedarme contigo y protegerte de cualquier peligro

Zagato y Nova se voltearon a ver sorprendidos

- Pues si ese es tu deber, te voy a dar una misión, quiero que acompañes y ayudes a Nova en su misión

- Como digas – diciendo esto desapareció (a los ojos de Zagato) y se colocó a un lado de Nova

*- ¿Necesitas ayuda? -* - Preguntó mentalmente Oa

*- No, yo puedo solo contra esa niña, no te metas -* - contestó Nova

*- Está bien -*

De pronto salió Windom, tomando de sorpresa a Oa, sintió mucha energía, y cuando se dio cuenta iba a chocar con la niña de ojos verdes y cabello rubio. Después… oscuridad

*************************************************************************

- Qué poco aguante, te cansas muy rápido

- Todavía tengo suficiente energía para vencerte

- Qué ilusa, si no has podido vencerme en todo este tiempo, y eso que además de pelear contigo estoy mandando un hechizo a las guerreras

- ¡NO TE PERDONARÉ ESTA BURLA!

- Como si pudieras hacer algo

Latis y Guru Clef habían logrado, después de como dos horas, encontrar a Lucy y Marina, respectivamente, y estaban intentado tranquilizarlas, objetivo que no lograban porque Oa seguía torturándolas con los recuerdos y con sus palabras

- Rayos, pagarás por esto

- No que no podía hacerte daño

- MALDITA, ¡YA VERÁS!

Y a así continúo la batalla, muy pareja, las dos manejaban muy bien la espada y los hechizos no se quedaban atrás, y a pesar de la oscuridad, las dos estaban dando lo mejor de sí, tanto que Oa no se dio cuenta de cuando Anaís "despertó"

*Por favor, detente, no lastimes a mis amigas*

Oa se descontroló, dándole ventaja a Isolda, que le hirió la pierna, por autoreflejo, Oa la congeló con un hechizo, quedando inmóvil también

*¿Por qué habría de hacerlo? Las tres deben de pagar por el daño que hicieron*

*Nosotras no queríamos hacer, nadie nos dijo lo que realmente estaba pasando*

*¿Y crees qué voy a creerte? Ni que fuera tonta*

*Esa es la verdad, te lo hemos estado diciendo las tres*

*Eso es lo que quieren creer para no sufrir, pero no se salvarán* "diciendo" esto desapareció, mandándole los recuerdos de las batallas

- Volvamos con la pelea – descongelo a Isolda y comenzó otra vez la batalla

No se dio cuenta, que Anaís había logrado deshacer el hechizo de sus amigas, la oscuridad estaba despejándose.

- ¿Qué está sucediendo aquí? – Gritó Tatra al ver la escena, atrayendo la atención de Tata y Paris, que entraron después de ella

Las escenas no eran nada agradables, Isolda y Oa/Anaís luchaban a diestra y siniestra con espadas y hechizos, Marina estaba llorando desconsolada mientras Guru Clef trataba de tranquilizarla, Lucy también lloraba, pero su mirada estaba perdida, Latis intentaba hacerla reaccionar

Comenzó a hacer mucho viento, las princesas e Isolda salieron volando fuera del salón, las puertas se cerraron bruscamente, dejando encerrados a todos los presentes

- ¡Detente Oa! – Se escuchó una voz varonil, conocida para todos, que retumbó por todo el salón

Oa se detuvo inmediatamente, quedando inmóvil y con los ojos bien abiertos

- Has causado mucho dolor y sufrimiento innecesariamente - está vez fue una voz de mujer

- Yo… lo siento, creí… que eso era… lo correcto

- Te equivocas, Oa, nunca ha sido correcto el lastimar a otros seres, y tú lo sabes perfectamente bien

- Lo sé, pero…

- Pero nada – regañó la voz de hombre – ellas te han dicho la verdad desde un principio, no fueron informadas de lo que estaba sucediendo, por lo tanto no son culpables de lo que hicieron, para eso fueron llamadas

- Hermano – pudo decir al fin Latis

- ¿Cómo has estado, Latis? - Preguntó Zagato materializándose junto a Esmeralda

- ¡HERMANA! - Gritó Paris corriendo hacia ella, pero Esmeralda lo detuvo

- Espera Paris, sólo soy una ilusión, no tengo cuerpo, por lo tanto no puedes tocarme

Paris se detuvo en seco – me da gusto verte hermana

- A mí también Paris, no sabes cuanto te extraño, a ti y a todos mis amigos, pero ahora no es el momento de platicar, venimos a arreglar un asunto de suma importancia – dijo mientras volteaba a ver a Zagato - ¿listo?

- Sí

Zagato se dirigió hacia Oa/Anaís, le puso la mano en la frente y comenzó a hacer un hechizo, mientras Esmeralda se dirigía hacia donde estaban Marina y Lucy, y separándolas de Latis y Guru Clef les puso las manos en sus corazones y empezó un hechizo

Paris se fue hacia donde estaba Latis y Guru Clef, que miraban asombrados lo que estaba pasando, ninguno lo podía creer [ni yo, si se me apareciera un muerto me da un infarto]

Los cuerpos de Lucy y Marina comenzaron a brillar, primero de su color y después se volvió blanco, en sus rostros se reflejó una paz y una tranquilidad nunca antes vista.

Él de Anaís vibraba, como si se estuviera separando, a los poco minutos, un cuerpo salió y Anaís dejó de vibrar, entonces Zagato repitió lo que estaba haciendo Esmeralda

Ya que terminaron, las chicas despertaron

- Guerreras Mágicas – Zagato – me quiero disculpar por lo que mi súbdito hizo, pero nunca se enteró de todo lo que ocurrió en la batalla

- Yo les quiero dar las gracias por haber cumplido mi deseo, ahora soy feliz con la persona que amo

- ¿Por qué no anulaste el sistema del pila como lo hizo Lucy?

- Nunca se me ocurrió, todo pasó tan rápido que lo único que se me ocurrió fue llamarlas a ustedes. Perdónenme por todo el sufrimiento que les cause

- Pero ahora ya lo hemos arreglado

- ¿Cómo?

- Fue simple, limpiamos su corazón de todo sentimiento de culpa que tenían, solo va a ver un problema, regresarán al Mundo Místico mañana

- ¡¡¡QQQQQQQQQQUUUUUUUUUUUUÉÉÉÉÉÉÉÉÉÉÉ!!! - todos

- Así es, regresarán mañana por la noche

- Nosotros tenemos que retirarnos, cuídense y sean felices.

- Y Paris, cuida a mi reino por mi, se que lo harás mejor de lo que yo lo hice

Diciendo esto desaparecieron, llevándose a Oa con ellos, todos se quedaron viendo con una cara de tristeza, sólo tendrían un día, sólo un día.

CONRINUARÁ…………