EL AMOR AL PROJIMO

Lucas 10:25

Lucas es el único escritor que ha preservado estas palabras de Jesús, de no ser por él, esta bella historia sería ignorada por nosotros.

Muchas veces, personas sinceras vinieron a Jesús preguntando que debían hacer para heredar la vida eterna. (Mateo 19:16-22; 22:35-40), pero esta vez la pregunta la hizo un abogado. (10:25)

1. El abogado era por profesión, un experto en la ley judía. Era un hombre que debía saber todas las respuestas por eso Jesús le pregunta ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo lees? (verso 26).

a). Lo que Jesús le está diciendo con estas dos preguntas es: "Tú eres experto en estos asuntos y por ello más que cualquier otro debes saber responder tu propia pregunta.

b). El abogado entonces citó inteligentemente Deuteronomio 6:5 y Levítico 19:18. mostrando que la ley demandaba amor perfecto para Dios y para el hombre (verso 27)

c). Jesús aprobó la respuesta (verso 28) pero agregó "Si guardas la ley tan bien como la citas, tendrás vida eterna.

2. La pregunta original del abogado, no nació con motivos sinceros (verso 1) y como la respuesta de Jesús le avergonzó, buscó la manera de salir del apuro preguntando ¿Quién es mi prójimo" (verso 29)

El camino que conecta a Jerusalén con Jericó, es famoso por sus lugares peligrosos.

1. Jerusalén está situada en unas colinas a unos 700 metros sobre el nivel del mar, en tanto que Jericó se ubica en una baja planicie cerca del mar muerto, a unos 335 metros bajo el nivel del mar.
2. El camino entre ambas ciudades cubre unos 27 klm pero desciende unos 1050 metros, es un camino que serpentea, vira y baja drásticamente. Esta senda zig-zag ha probado ser muy peligrosa a través de los siglos.

1. Josefo: en el primer siglo la describe como "desolada, rocosa y llena de bandidos.
2. Jerónimo: en el siglo IV habló de un lugar en el camino como "La senda roja o sangrienta" porque mucha sangre había caído allí.
3. W.M.Thompson: que fue misionero por treinta años en aquella región del mundo, la describe en su libro La Tierra y el Libro diciendo: "Pasamos la puerta de San Esteban , serpenteamos en la senda por el valle angosto de Josafat sobre el punto sur del Olivar, por las ruinas miserables de la ciudad de María, Marta y Lázaro y entonces nos preparamos para descender, porque se acuerda que hay que descender a Jericó. Y, de seguro descendimos y descendimos, sobre piedras resbaladizas, más de una milla, cuando la senda se hacía menos estrepitosa, aún así, sin embargo, el camino sigue el canal seco de un arroyo por algunas millas más, como si descendiéramos a las mismas entrañas de la tierra. ¡Cuán apropiadamente adecuado para ladrones!.

1. Sin duda era judío
2. Tal vez se piense que era muy descuidado al viajar solo por un camino tan peligroso. Sobre esto no se puede hablar mucho pues los otros viajeros también lo hacían solos.

1. El Sacerdote.
1. Había muchos sacerdotes en Palestina
2. Desde los tiempo de David los sacerdotes habían sido divididos en veinticuatro órdenes (1ª.Crónicas 24:1-19) Cada turno servía en el templo dos veces al año por una semana a la vez.
3. Jericó ,como Jerusalén, era una ciudad de muchos sacerdotes, por eso a menudo se veía a los sacerdotes y levitas que iban camino del desierto.
4. El sacerdote de la Parábola, miró una vez al hombre herido y pasó por el lado.
2. El Levita:

a. Los Levitas eran miembros de la tribu de Leví que no eran sacerdotes, sino servían como ayudantes a los sacerdotes en las muchas funciones del servicio del templo (1ª.Crónicas 23:24-32) El levita, como el sacerdote, según la parábola, miró al hombre y pasó de lado. Indudablemente el sacerdote al igual que el levita conocían las demandas de Dios, pero en sus vidas diarias no reconocían las demandas de humanidad.

3. El Samaritano.

En los tiempos de Cristo, la odiosidad entre judíos y samaritanos era tan grande que los judíos que viajaban entre Galilea y Jerusalén preferían cruzar al lado este del río Jordán y pasar por Perea antes que pasar por la tierra de los samaritanos . Con lo anterior entonces, no es de extrañarnos que Jesús tomara a dos personas que representaban lo más fuerte en enemistades de aquella época para mostrarle a este abogado lo que significa el verdadero amor al prójimo.

1. Se ha dicho que esta parábola es la más práctica de todas pues llega al fondo de los que es , o debiera ser, el cristiano.
2. En esta enseñanza no hay lugar para un cristianismo abstracto, ni para una religión vista por los hombres, con este ejemplo Jesús nos obliga a ver que el cristianismo es una forma de vivir, aquí vemos tres actitudes del cristiano verdadero.

1. La compasión del cristiano.

En la parábola el samaritano se distingue del sacerdote y del levita por muchas maneras.

a). El sacerdote y el levita no conocían al hombre herido, por tanto no se preocuparon.

b). El samaritano tenía un corazón compasivo, había un hombre que necesitaba ayuda, era su enemigo, pero el no vio esto, sino sólo vio a un hombre que necesitaba ayuda.

c). El mundo realmente necesita hombres compasivos, hombres con corazones grandes.(Mateo 5:7; Colosenses 3:12, Lucas 6:36)

d). Nosotros a veces nos parecemos mucho al sacerdote y al levita, seguramente ellos podían dar cien excusas por las cuales no ayudaron a este hombre:

e). Nosotros también presentamos muchas excusas para no ayudar, decimos " Señor, no se merecen la ayuda". El nos dice que el punto no es quién merece la ayuda, sino quién la necesita.

f). Decimos "Señor, ellos se han metido en eso" El nos dirá "puede ser, pero tu te haz metido en muchos más y yo aún tengo misericordia para ti".

h). Muchos individuos que buscan ayuda han encontrado solamente a un mundo frío; y a veces, como en esta parábola, la gente de corazón más frío es la que profesa ser más religiosa, que falta les hace a ellos leer Santiago 1:27.

 

2. La conducta del cristiano..

En la parábola, el samaritano ejemplifica los principios de la conducta cristiana. La compasión no es verídica sino es más que una emoción, la compasión real afecta a la conducta. Hay tres distintas reglas que siguen los hombres en sus conductas.

a). La regla de Hierro. Esta dice. "El derecho lo da la fuerza".

• Los ladrones de la parábola ilustran esta regla, Se unieron en banda, se armaron, y emboscaron a un viajero solitario.

b). La regla de plata. Esta dice "No hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti"

• El sacerdote y el levita seguían esta regla. Estos dos eclesiásticos no le hicieron ningún daño al herido, pero tampoco le hicieron ningún bien.
• Mucha gente es así, sienten que ser cristiano consiste sólo en no hacer ciertas cosas, no tienen un sentido de responsabilidad hacia los demás.

c). La regla de oro. Esta dice "y cómo queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos" (Lucas 6:31)

• Esta fue la regla por el cual vivió el samaritano.
• Cuando vio al herido, imaginó verse a si mismo en esa zanja. Su deber era ayudar.
• Se detuvo y prestó los primeros auxilios, lo puso sobre su cabalgadura y fue por más ayuda (verso 34)
• Lo cuidó durante la noche, a la mañana siguiente, teniendo que partir, se aseguró que el herido tuviera la atención necesaria. Podemos razonar que mientras atendía al herido, el se preguntaba ¿qué más puedo hacer?
• De esta forma, la religión de la regla de oro es positiva. El cristianismo es más que ir a la iglesia y hacer oraciones. Un grupo de personas puede hacer estas mismas cosas por años y todavía ser una iglesia muerta.
• El cristianismo es una manera de vivir. Es una manera de darse a otros,. Nos debemos a otros.

Los judíos en los tiempos de Cristo, vivían en un círculo cerrado, interesados sólo en si mismos, odiaban a las demás gentes y las consideraban inmundas.

La ley en verdad decía que uno debía amar a su prójimo, pero los judíos interpretaban este mandamiento como si hubiera dicho que un judío debía amar solamente a un judío.

No sentían ninguna obligación para con los gentiles, Decían por ejemplo, que si un sábado caía una pared sobre un hombre, se podía sacar solamente lo suficiente para ver si la víctima era judío o gentil, obviamente si era judío se le podía ayudar, si era gentil, sería una violación al sábado ayudarle.

No nos debe sorprender entonces que Jesús escogiera a un samaritano despreciado para que tuviera el papel principal en este cuento.

Es fácil hoy en día para nosotros encontrar fallas en el prejuicio judío, pero, si vemos nuestra vida, queda manifiesto que las personas que reciben nuestra ayuda son nuestros amigos.

¿a quiénes concedemos favores? ¿a quiénes invitamos a comer?. No podemos restringir nuestra ayuda a ciertas clases sociales, razas o a un credo religioso. Nosotros también tenemos que preguntarnos ¿Quién es mi prójimo?

Jesús concluye su historia preguntando al abogado cual de los tres aprobó ser el prójimo del hombre que cayó en manos de los ladrones. (verso 36). El abogado respondió acertadamente, por tal razón Jesús le manda a él a hacer lo mismo (verso 37)

Con esta parábola sobre el samaritano, Jesús fija la atención sobre "mis" obligaciones para con todos los hombres. Yo debo a otros algo que tengo que pagar.

La pregunta no es tanto ¿quién es mi prójimo? Sino ¿de quién soy prójimo?. Todos somos viajeros y hay dos lados del camino, el de los necesitados y el de quiénes pueden ayudar, a todos nos corresponde en algún momento estar a ambos lados.

Cuando viajemos por el lado que lo hizo el samaritano, viajemos con una mirada atenta, un corazón compasivo, listo para prestar la ayuda que sea necesaria , de ese modo llegaremos a la vida eterna, que fue la pregunta que hizo el abogado a Jesús . (verso 25)