Misión de El Sahara Occidental. Fundada en 1954
Los Oblatos estamos en el Sahara occidental desde el año 1954, cuando el territorio estaba bajo el gobierno español. La comunidad entonces se extendía por el territorio. Ciudades como El Aaium, Sidi Ifni, Tarfaya, Dahla etc. Desde ese año el Prefecto Apostólico es un Oblato español: Mons Erviti. Le sucede el P. Acacio Valbuena, hasta febrero de 2009. Desde entonces le sustituye el P. Mario León se encargo como Administrador apostolico hasta que el 29 de septiembre ha iniciado oficialmente su mandato como Prefecto Apostólico.
En la actualidad, los unicos sacerdotes y religiosos que trabajan en el territorio. La situacion permite su presencia solo en cuanto representantes de la Santa Sede y para el servicio religioso esclusivamente dirigido a los cristianos extranjeros , sobre todo personal de las Naciones Unidas presentes para controlar y aliviar la tensión todavía presente.
Por la gente, el puesto de misión es vista como presencia silenciosa y tambien constructiva. Es de remarcar, la relación que se mantiene con personas y familias concretas. Impresiona oir de sus labios, el recuerdo permanente que manifiestan por los oblatos así como la estima profunda que mantienen desde los comienzos hasta el día de hoy.
Junto al P. Mario vive en el Sahara desde hace vario años , el P. Valerio Eko, superior de esta pequeña , particular mision y comunidad que de vez en cuando recibe la visita de algún compañero oblato.
Nos movemos en dos lugares de mision: Layoounne, en el norte y Dakhla en el sur a 520 klmetros más al sur, en límite con Mauritania.
Se asegura regularmente la Eucaristía y otras celebraciones compuestas por cristianos que vienen de los cuatro angulos del mundo. El aspecto internacional y ecumenico es especialmente interesante.
La atención a los pobres se desarrolla de manera informal. En Dakhla es significativa la colaboración que se mantiene con un centro de rehabilitación para niños con dificultad motora fundada por un hombre vivo e inteligente. Podemos considerar tanto a él como su familia , verdaderos colaboradores; Aun siendo musulman, su estima por los oblatos es proverbial y esto se puede decir de otros muchos.