A
tan solo hora y media de la ciudad de México
se halla esta zona arqueológica, como es muy pequeña (solo
el centro ceremonial esta abierto al público) pueden concluir con
la visita en un par de horas. Este lugar cuenta con museo de sitio donde
se conserva lo encontrado por Jorge Acosta en las exploraciones
de campo.
Hace ya algunos años el arqueólogo Jorge Acosta propuso que el gran Tollan al que se referían las crónicas Chichimecas era Tula en el estado de Hidalgo y no Teotihuacan como había pensado a principios de siglo Leopoldo Batres. ¿En que se basó Acosta para postular su teoría?
Aparte
de pruebas de radiocarbono donde se prueba que las piezas de Teotihuacan
son anteriores a las del Tollan (500 años aproximadamente
de diferencia) se descubrió una red de comercio impresionante en
Tula. Se pueden apreciar incluso el uso abundante de la turquesa
traída desde La zona de los Anazasi en Arizona
(actualmente E.u.) donde era común su explotación, así
mismo productos que venían desde Chiapas
y Guatemala, esta red de comercio solo se puede
comparar a una como la que se efectúo en la cercana Teotihuacan.
Un punto a discutir es la poca monumentalidad del lugar que comparándola
con sus homónimas se ve opacada, a pesar de ello, la evidencia arqueológica
nos dice otra cosa.
Aquí vivían los Toltecas, herederos de la tradición Teotihuacana. Tuvieron un esplendor muy corto en comparación a sus predecesores (900-1200 d.C.), sin embargo, sirvieron de modelo para las peregrinaciones Chichimecas posteriores, siempre se decía: las buenas artes Toltecas y trataban de imitarlos; tal es el claro ejemplo de Texcoco que vio en tiempos de Nezahualcóyotl un renacer de las artes Toltecas enseñadas en los Calmecac.
De aquí proviene el sacerdote Ce Acátl Topiltzin Quetzalcóatl que llegó a tener mucho poder por estos lugares. No lo confundan con el dios Quetzalcóatl que se sacrificó y por eso estamos aquí, lo que sí es una realidad es que juró regresar para liberar a su reino y en una coincidencia histórica abandona la tierra firme por el oriente atravesando las aguas inmensas, mismo lugar por donde llegan los barbudos europeos siendo confundidos y atribuidos a la furia de Quetzalcóatl.
Otro aspecto controversial de Tula es la fuerte influencia que ejercieron sobre Chichen Itzá en Yucatán, existe gran similitud en la disposición de los edificios ceremoniales que parece una sucursal, no existe duda en que existió una influencia y posiblemente con la milicia como instrumento, la duda recae en ¿qué fue primero? – El huevo o la gallina. - Es decir, ¿quién invadió a quién?
Para
ello debemos hablar un poco del estilo arquitectónico que imperaba
en la península de Yucatán hacia
finales del clásico (900 d.C.) dominado prácticamente por
el Puuc en el norte que consiste en edificios alargados de
poca altura y mucho relieve de la mitad del edificio para arriba, este
era el estilo de Chichen. Llegan
incursiones del centro de México con nuevos dioses y nuevos estilos
arquitectónicos desplazando los antiguos centros ceremoniales y
dejando nuevos edificios más altos con un mero estilo Tolteca.
De manera contraria no vemos ni una muestra de estilo Puuc en
el altiplano. De lo anterior pueden ya sacar algunas conclusiones y por
supuesto muchas más dudas.
Las colosales figuras que aprecian en las fotografías son llamadas Atlantes de Tula y formaban parte de las columnas que sostenían el templo ceremonial, estas imponentes figuras son guerreros muy bien armados con cerbatanas y escudos esto denota el carácter guerrero de los Toltecas.